Rangel Fajardo sobre los cultivos de arroz perdidos bajo el agua del Río Vinces. Foto Mario Faustos / EL COMERCIO
La escuela Víctor Mercante es su hogar temporal. En sus aulas, 61 personas han adecuado sus habitaciones, divididas por biombos de tela. En los salones hay colchones donados y las pocas pertenencias que lograron rescatar.
Todos salieron de sus casas hace una semana, cuando el río Vinces rompió un muro e ingresó con fuerza a la zona urbana de la parroquia Antonio Sotomayor, en el cantón Vinces (Los Ríos). “No nos dio tiempo para nada. Tuve que salir nadando de mi casa”, recordó Daysi Zapatier.
Mientras las familias tratan de adaptarse, brigadas de distintos ministerios llegaron este viernes 29 de marzo de 2019. Hay médicos y parvularias, también técnicos que toman datos de las viviendas afectados y quienes reparten raciones. Este lunes se tiene previsto que el presidente Lenín Moreno visite el lugar.
Los Ríos es la segunda provincia con mayor impacto por las lluvias. Ha reportado 71 eventos peligrosos, 45 de ellos por inundaciones. Desde octubre de 2018 acumula 8 872 afectados por las lluvias y 70 damnificados.
Gisela Campos trata de no llorar. Cuando la inundación empezó sus padres estaban solos en casa.
Jacinto León perdió su cultivo de arroz por el ingreso de las aguas del Río Vinces. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
“No tenían cómo salir. A él le dio un derrame hace tres años. Gracias a Dios un policía lo sacó”. Detrás, fuera de un aula, Eloy y Clara intentan sobreponerse a la pérdida de sus enseres. Los dos pasan de los 80 años.
Antonio Sotomayor se ubica a unos 30 minutos de Vinces. Aquí viven 16 300 habitantes y por el impacto de las lluvias se han adecuado tres albergues. El presidente de la Junta Parroquial, Felipe Avellán, explica que están en emergencia porque el 95% de la localidad se inundó.
“Hemos detectado roturas de muros de contención en siete sectores. Los ríos se han llevado hasta 50 metros en estos tramos”. Por ello pide ayuda a las autoridades cantonales y provinciales para reforzar los diques.
El agua ya ha disminuido, pero ahora es más evidente la huella de la destrucción. En los caminos que se internan en la zona rural, las familias sacan de sus viviendas los objetos y electrodomésticos enlodados. Los racimas de plátano se pudren, al igual que las matas de cacao.
Tres albergues acogen a las familias afectadas por las lluvias en Antonio Sotomayor, en Vinces. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Jacinto León reposa por obligación en una hamaca colgada junto a sus cultivos en el recinto San Luis. Todo está cubierto por un extenso espejo de agua. “No hay nada, no hay trabajo. Los cultivos se fueron a pique. Necesitamos ayuda”.
El sector agrícola es el más golpeado. De las 25 806 hectáreas de cultivos con afectación parcial en todo el país, Los Ríos suma 18 161. Otras 4 093 hectáreas han sido reportadas por el Ministerio de Agricultura con afectación total. En esta provincia hay 1 163 productores con pérdidas.
Quienes viven en esta parroquia calculan que el agua terminará de descender en un mes. En el albergue de la escuela Víctor Mercante algunas familias ya quieren volver a sus hogares, pero el espeso y fétido lodo se los impide.