Vestidos con trajes de marinero, una pareja de cuyes representando a Oliva y a Popeye, los personajes de los dibujos animados de la televisión, ganaron el primer lugar en el concurso de disfraces del Séptimo Festival de Cobayos 2014.
En la ciudad de San Gabriel, provincia del Carchi, en el norte de Ecuador, a mediados de mayo se desarrolla una fiesta que promueve la producción de estos animales domésticos, destinados a la alimentación y al comercio.
La cita incluye también la premiación al cuy más pesado en pie y a los mejores platillos preparados con este ejemplar andino.
Oliva y Popeye, que lucieron diminutas gorras azules con un ancla dorada, camisas blancas con botones y pantalones del mismo color, representaron a la Asociación San Pedro de Canchaguano.
Clara Zambrano, la presidenta de esta institución que aglutina a 13 socios, comenta que las ropas las mandaron a confeccionar con dos meses de anticipación.
La costurera Beatriz Jiménez, la modista de los minúsculos animales, no necesitó tomar las medidas a los cuyes. Más bien asegura que aplicó el sentido común para cortar y coser los trajes, que sorprendieron al jurado.
Como dicta el reglamento, Zoila Tulcán y Remigio Cuantinpaz, miembros de la Asociación San Pedro, luciendo también uniformes de marineros, llevaron a las mascotas en sus manos.
El Festival de Cuyes es una iniciativa del Municipio de Montúfar.
No hay datos oficiales de cuántos cobayos hay en el país. Sin embargo, se estima que solo en este cantón del Carchi, en la frontera con Colombia, hay aproximadamente 7 200 ejemplares, explica Amilcar Rivera, técnico del Cabildo. “El objetivo es que con la crianza de estos animales menores los pequeños productores de papa incrementen sus ingresos”.
Como parte del proyecto, el Municipio entrega ladrillos, mallas de alambre y techos de eternit, para la construcción de las jaulas. También dona cuyes reproductores y capacita a los campesinos de esta jurisdicción.
El segundo lugar, en el concurso de disfraces, fue para la Asociación Tusa Gabal, dedicada a la producción de tejidos de lana a mano. Patricia Lloré, una de las integrantes de esta organización, señala que vistieron a una pareja de cuyes negros como ovejas blancas. “Nuestra idea es revitalizar los tejidos que también son parte de la tradición en San Gabriel”.
En total participaron 12 organizaciones dedicadas a diferentes actividades productivas. María Paspuel, una de las emprendedoras, explica que se realizan seis ferias gastronómicas en Carchi y tres a escala nacional.
En la última edición del Festival de Cuy se comercializaron 600 ejemplares tanto asados como vivos, para la crianza y la reproducción. Se estima que llegaron 2 000 turistas de Imbabura, Pichincha y del sur de Colombia.
El jurado que calificó a los animales disfrazados estuvo integrado por tres representantes de organizaciones campesinas provinciales, autoridades locales y especialistas en la producción de esta especie.
A Mauricio Bastidas, exvicealcalde de Montúfar y uno de los jueces del certamen, le sorprendió la imaginación de los productores que vistieron con sus mejores galas a los cuyes.
Hubo trajes de payasos, santos, indígena, duendes, raperos…