La compañía trasnacional Curimining SA retomó el fin de semana el control de sus instalaciones en el cantón Las Naves (Bolívar). Eso, luego de permanecer cuatro días en poder de un grupo de comuneros, que se opone a su gestión en la zona.
La acción ocurrió tras la incursión policial de la madrugada del sábado pasado, en la que fueron desalojados cerca de 200 pobladores de unas 30 comunidades.
El martes pasado ocuparon por la fuerza el campamento de la compañía minera.
La comunidad tomó la acción para evitar que lleven a cabo trabajos de exploración minera en la zona, pues cree que contaminarán pastizales y fuentes hídricas.
La incursión policial estuvo a cargo de 130 agentes, que luego fueron reforzados por otro grupo de gendarmes.
Horas antes, los pobladores comenzaron a sacar implementos de trabajo, así como herramientas y maquinarias que Curimining SA mantenía en la comuna Naves Chico. “¡No queremos minería, que se vayan los mineros!”, gritaban los comuneros, la noche del viernes pasado.
Durante la acción de desalojo hubo forcejeo y golpes. “Hay comuneros golpeados y hasta un niño resultó con la mano quebrada”, dijo Patricio Gil, jefe político del cantón Las Naves.
Siete pobladores fueron detenidos y llevados al cantón Echeandía. Allí fueron enjuiciados por ingresar ilegalmente a esa propiedad y destruir sus bienes.
El fiscal Ramiro Albarracín los acusó de asociación ilícita y pidió la prisión preventiva de ellos, durante una audiencia oral de formulación de cargos.
Sin embargo, el juez Cuarto de Bolívar, Víctor Paredes, los liberó, pero dispuso que se presentasen cada ocho días a su despacho, como medida alternativa.
Mientras tanto, la compañía minera intenta retomar sus actividades. El personal regresó el domingo a las instalaciones, donde ejecuta el proyecto Curipamba sur de exploración para la búsqueda de oro, plata y otros minerales.
Al parecer encontraron la maquinaria destruida, como el taladro para perforación de suelo.
“Estoy haciendo la evaluación para ver los daños, pero la idea es reanudar los trabajos lo más pronto posible”, dijo Diego Bastidas, gerente técnico de ese proyecto de Curimining SA.
El técnico calcula que los daños económicos sobrepasan los USD 100 000. Miembros de la Policía dan seguridad a la compañía minera. Los comuneros anunciaron que efectuarán una marcha de protesta en los próximos días.