Fausto Cardoso se lamenta la muerte del cóndor en Azuay. Se refiere al de la foto que circulara en las redes sociales y provocará una reacción masiva de los defensores de las especies de aves y animales.
A Cardoso, arquitecto amante de lo patrimoninal, no solo le peocupa por ser una especie en peligro de extinción, sino porque hay un 80% de probabilidades de que sea ‘Arturo’, al que él siguió desde su nacimiento.
Cada 20 días, Cardoso, junto con el fotógrafo Gustavo Landívar, viajaban hasta el sur de la provincia del Azuay para fotografiar al ave recién nacida, que recibía los cuidados de su madre, a la que bautizaron como ‘Soraya’.
Los dos documentaron, con fotografías, la crianza de esta ave. Cómo ‘Soraya’ lo alimentaba desde su buche lleno y ‘Arturo’ abría el pico para recibir la carroña. Asimismo, la forma en la que mudó su plumaje gris por uno negro imponente.
Cardoso también recuerda cuando ‘Arturo’ se paró en una roca y extendió sus alas para probar el viento y ensayó sus primeros vuelos, junto a su madre.
En esa etapa estos cuencanos descubrieron a Manuel, el padre de Arturo, quien llegaba para ver la evolución de su crío.