Cinco galpones, con alrededor de 30 000 aves de postura, fueron arrasados por un aluvión de lodo y piedras que descendió por la quebrada del cerro Mul Mull.
Este fenómeno se produjo la madrugada de este martes 18 de mayo del 2021 en el sector Las Queseras de la parroquia Cotaló del cantón Pelileo, en la provincia de Tungurahua.
Un informe entregado por la Junta Parroquial de Cotaló detalló que también se perdieron 10 000 truchas de un criadero.
El aluvión provocó la inundación de cinco casas de la parroquia. Al momento, la maquinaria de la entidad trabaja en la limpieza de la vía principal, cubierta con el material pétreo y lodo.
Luis Solano, presidente de la Junta Parroquial, informó que una parte de las tuberías del sistema de conducción del agua potable está afectada. “Poco a poco estamos trabajando en la reparación del sistema del agua con maquinaria contratada, esperamos que llegue el equipo caminero del Municipio de Pelileo y del Consejo Provincial”.
La casa que era utilizada para las sesiones de los vecinos está a punto de desplomarse. Las bases de la vivienda se socavaron con la fuerza del agua.
Mencionó que las pérdidas registradas en la zona ascienden a USD 800 000, puesto que a más de los galpones se destruyó maquinaria avícola.
Los moradores del sector ayudaron a rescatar a las gallinas que sobrevivieron.
Lauriana Núñez, familiar de los propietarios de la granja avícola, contó que las pérdidas con maquinaria y las aves bordean los USD 500 000. “Fue un estruendo que nos hizo levantar a todos, pero no se pudo hacer nada. Tuvimos que esperar a que amaneciera para evaluar los daños y tratar de recuperar lo que aún quedaba”.
Lograron salvar 20 000 aves, pero aún corren el riesgo en el lugar, porque el agua sigue bajando por la quebrada. “Las autoridades se comprometieron a enviar maquinaria, hemos estado esperando para desviar el caudal; pero no ha llegado”.
Parte del trabajo de 35 años de sus abuelitos se perdió, comentó. Pidió el apoyo de las entidades bancarias para que les ayuden en la renegociación de las deudas que mantienen con las entidades financieras. “Esperamos que nos ayude el Gobierno, caso contrario quebraremos”, mencionó Núñez.