En Santo Domingo de los Tsáchilas, una ciudad del occidente de Ecuador, el teléfono de la familia Rodríguez suena hasta tres veces en una hora. Se trata de los clientes que quieren apartar un espacio para adobar y hornear el pavo para la cena navideña de este 24 de diciembre del 2013.
La hija mayor de la familia, Tatiana Rodríguez, dice que el éxito del negocio familiar, que se activa solo en diciembre, se debe a que ofertan un servicio completo. “El pavo sale listo para colocar en la mesa”.
Como ellos decenas de negocios de la provincia ecuatoriana se activan. Ofertan sus servicios a través de cuentas de facebook y también colocan letreros en las casas donde se hacen.
Se ha convertido en una actividad familiar. “Mi abuelita le enseñó a mi mami, pero nunca pensamos que este conocimiento nos serviría para crear un negocio”, señala Rodríguez en la víspera de la Navidad, el 23 de diciembre del 2013.
Ellos ofrecen este servicio desde hace seis años. Hornean hasta 100 pavos desde el 10 de diciembre hasta fin de año. Lo hacen en dos hornos artesanales. En estos también gratinan las papas con las que adorna una bandeja en la que se coloca el pavo.
[[OBJECT]]
“Antes nos preocupábamos por nuestra cena, pero no teníamos mayor contacto entre nosotros. Ahora todos nos levantamos temprano y nos acostamos tarde para cumplir con los pedidos. Nos colaboramos y estamos felices sabiendo que contribuimos con otra familia para que disfruten de la Navidad”.
En la ciudad de Cuenca, la capital de Azuay, en el Austro de Ecuador, los locales que ofrecen el horneado del pavo y perniles tienen demanda en desde el fin de semana pasado. En el barrio de Todos Santos, ubicado en el Centro Histórico de la ciudad patrimonial del mundo, el aroma de las especerías y un calor singular se percibe a 30 metros de llegar a la panadería de Alejandro Arias.
Este artesano azuayo, que tiene su negocio desde hace 36 años, se dedica a hornear pavos. Él está ajetreado porque los pedidos aumentaron en los últimos días de diciembre del 2013. Tiene más de 200 pedidos para este 24 de diciembre del 2013, que los prepara en cuatro hornos de leña. “Esto hace que su sabor sea especial”.
Otros locales funcionan en la calle Juan Jaramillo y en los sectores de El Vado, Inmaculada, Mutualista Azuay I, Totoracocha, Fátima y Gapal. Los costos oscilan entre los USD 15 y 25. En este último valor se incluye la salsa y el ají.
[[OBJECT]]