Una fuerte actividad comercial y vehicular en varias ciudades en la etapa de 'nueva normalidad', pero con semáforo rojo

En el mercado 30 de Julio, en Santo Domingo, se conservó la distancia entre clientes y vendedores. Bolívar Velasco/ EL COMERCIO

En el mercado 30 de Julio, en Santo Domingo, se conservó la distancia entre clientes y vendedores. Bolívar Velasco/ EL COMERCIO

Las ventas informales aparecieron en las calles del centro de Esmeraldas. Marcel Bonilla / EL COMERCIO

Desde este lunes 4 de mayo del 2020 se retomaron varias actividades comerciales bajo la modalidad de envíos y entregas a domicilio, como parte del inicio de la nueva etapa de distanciamiento social por la emergencia sanitaria.

En ciudades como Quito, Ambato, Santo Domingo, Esmeraldas, Cuenca y Riobamba se empezaron a difundir todo tipo de productos y servicios a través de redes sociales o por teléfono. También hubo más afluencia de personas en las calles y en los exteriores de varios locales.

Más gente salió de casa en la Sierra norte

Una fila de casi 150 metros de distancia se formó en los exteriores de un banco en el centro de Ibarra. Una alta afluencia de personas también se registró en varios supermercados de esa zona. Más vehículos llenaron las calles, pese a que no todos podían circular.

Los pocos locales comerciales que abrieron sus puertas lo hicieron para despachar ventas hechas por teléfono o Internet. Elvis Briceño, de una boutique, explicó que optaron por las ventas en línea para reactivar el negocio. Por sus redes sociales enviaron fotos de las prendas e información de tallas y precios. El pago se realiza por depósito bancario y la entrega es a domicilio. En las dos primeras horas de reactivación vendieron un par de zapatos.

Obreros como Nelson Ipiales salieron a ofrecer su mano de obra en la plazoleta Francisco Calderón, pero al igual que varias personas, no lograron ser contratados para trabajos de reparación.

Alta afluencia y más comercio en la Sierra centro

Movimiento en los alrededores de los mercados y plazas, en las esquinas de las calles y cerca de los bancos fueron la tónica en Ambato.

Las camionetas y automóviles sustituyeron a los buses. Los pasajeros viajaron en los baldes de las camionetas. El pasaje costó USD 0,50.

En Riobamba las calles estuvieron transitadas y con presencia de vendedores ambulantes, por lo que se hicieron varios operativos para controlar las ventas informales. También hubo operativos de control de vehículos. En la ciudad se vio una circulación mayor a la usual y hasta el mediodía se reportaron más de 15 citaciones.

En las redes sociales empezó a promocionarse el servicio de reparación de instalaciones eléctricas, gasfitería y reparación de electrodomésticos.

Varias personas salieron a hacer trámites en Cuenca

La presencia de personas y vehículos en las calles se incrementó. Los ciudadanos, protegidos con mascarillas, caminaron por el Centro Histórico para ir a los bancos a los mercados.

La Empresa de Movilidad, Tránsito y Transporte de Cuenca aclaró que los taxis no están autorizados para entregas a domicilio y que la ampliación del horario de 14:00 a 19:00 es para los taxistas que movilizan a trabajadores de los sectores estratégicos.

Las entregas a domicilio también se incrementaron. Efrén Monge, por ejemplo, contó que en la última semana entregó 600 libras de queso artesanal. 

Calles cerradas y controles en Santo Domingo

El movimiento vehicular en Santo Domingo de los Tsáchilas se incrementó. Una parte de las avenidas Quito y Esmeraldas y las calles 29 de Mayo y Ambato estuvo cerrada al tráfico vehicular desde la mañana.

Alrededor de esas rutas están los principales centros de abastos. Carros de la Policía y vallas metálicas bloquearon esos accesos.

En el mercado 30 de Julio, en Santo Domingo, se conservó la distancia entre clientes y vendedores. Bolívar Velasco/ EL COMERCIO

El comandante de la Policía, Richard Coellar, informó que se montaron 30 puntos de control vehicular y hasta el mediodía se emitieron 30 citaciones. Cerca de 300 taxis volvieron a las calles. En esta provincia el COE cantonal autorizó que solo se movilice a un pasajero durante las horas permitidas para las labores.

Esmeraldas y Manabí se reactivaron poco a poco

El casco comercial y bancario de Esmeraldas amaneció ayer con más movimiento que en días anteriores. Los negocios de venta de telas, artículos tecnológicos y accesorios para teléfonos atendieron con la puerta medio abierta.

En el centro de Esmeraldas se formaron largas filas. Un mayor movimiento también se observó en las ferreterías. Las mecánicas abrieron parcialmente. Los comerciantes informales se multiplicaron en las calles del centro. Aunque se observó más movimiento vehicular, no se reportaron sancionados.

En Portoviejo empezaron a circular desde este lunes los taxis que se usaron además para entregas a domicilio de ferreterías, locales de comida, abarrotes, bisutería, entre otros.

En Manta también se habilitó el servicio a domicilio. Durante esta semana, los repartidores deberán registrarse para que la Policía Municipal pueda hacer controles, a través de un registro de empadronamiento.