Este 16 de julio del 2016 se cumplieron tres meses del terremoto que devastó a gran parte de las provincias costeras de Manabí y Esmeraldas. Como parte de la ayuda para las familias damnificadas, en la capital azuaya se desarrolló la feria Somos tus manos Ecuador.
El evento se realizó en el concurrido parque de La Madre y participaron 50 emprendedores dedicados a la elaboración de golosinas, comida típica y artesanías en diferentes texturas como tagua, madera, conchas, coco, paja toquilla, entre otras fibras vegetales.
La esmeraldeña Elisa Quiñonez, de 53 años, participó con una amplia línea de carteras y cestas elaboradas en chocolatín y bejuco, fibras vegetales que crecen en los pantanos de la provincia. Su capacidad para crear es amplia y empezó de niña.
Pero desde hace 20 años abrió su taller en la parroquia Borbón, perteneciente al cantón Eloy Alfaro, en el norte de Esmeraldas. Allí elabora desde botones hasta juegos de tazas en mate; y desde paneras hasta juegos de comedor en chocolatín.
Ella es madre soltera y tiene seis hijos. El terremoto afectó parcialmente su casa y pese a las adversidades sigue luchando por los suyos. Quiñonez fue invitada a participar en este feria por el Instituto Nacional de Economía Popular y Solidaria (IEPS).
Esto nos ayuda a levantarnos de la tragedia, a tener un ingresos para mantener a nuestras familias y a creer que vienen tiempos mejores para nosotros, porque los ecuatorianos nos apoyan, dijo esta artesana que vendió más de la mitad de la producción que trajo a esta feria.
El IEPS y los ministerios de Inclusión Económica y Social y el de Producción, Empleo y Productividad coordinaron esta ferias y las ferias que se realizaron en Quito y Guayaquil en semanas anteriores. El objetivo es dinamizar la economía y mejorar la calidad de vida de las familias damnificadas, señaló Marcelo Ordóñez, de la zonal 6 del MIES.
En Guayaquil también participó Luis Cobeña, del cantón Rocafuerte, provincia de Manabí, con bisuterías en tagua como collares, aretes, pulseras, anillos, figuras de animales, flores… Para él, en Cuenca se movieron mejor las ventas, porque hubo más afluencia de gente.
La esmeraldeña, Gilma Quiñónez, coincide con Cobeña. Ella pertenece a una asociación de 28 mujeres que elaboran alimentos y adornos en coco: cocadas de diferentes sabores, aceite, manjar y con la corteza una variedad de artesanías. “Acá las ventas estuvieron muy buenas”, dijo.