Este miércoles 15 de agosto del 2018, los familiares de las víctimas del siniestro en Papallacta llegaron a la morgue de Quito para recoger los cuerpos. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
El número de accidentes de tránsito por exceso de velocidad se incrementó en el país este año. El último reporte de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) revela que el irrespeto a los límites establecidos es la segunda causa de siniestros a escala nacional.
Por eso, el Gobierno ha anunciado la implementación de radares en todas las carreteras del Ecuador. Aunque no se conocen detalles de esta iniciativa, la idea es reducir la tasa de mortalidad en las vías.
El número de personas muertas en este tipo de accidentes también aumentó este año. Solo en el primer semestre, los fallecidos suman 1 058. En el mismo período del 2018 hubo 1 011 víctimas. De hecho, el aumento de radares se oficializó tras contabilizar 23 muertos y 22 heridos en el siniestro que ocurrió el martes, en la vía Pifo-Papallacta. El domingo, fallecieron 12 hinchas de Barcelona en un accidente ocurrido en Molleturo.
El drama del choque entre el bus de Coltrans y el jeep aún se evidenciaba este miércoles 15 de agosto del 2018. En especial, en los exteriores de la morgue de Quito. Al sitio llegaron los familiares de las víctimas para reconocer los cadáveres.
En un comunicado, la Cancillería de Ecuador dijo ayer, 14 de agosto del 2018, que se identificaron a 12 ciudadanos colombianos, cuatro venezolanos y dos ecuatorianos; es decir 18 personas.
Kléver Viteri, capitán de la Policía y jefe de Medicina Legal, informó que hasta este miércoles 15 de agosto fueron identificados 13 cuerpos; siete eran colombianos, cuatro venezolanos y dos ecuatorianos.
“En este accidente de tránsito, lamentablemente, los cuerpos vinieron sin documentos de identidad, lo cual dificultó nuestro trabajo”, manifestó.
Para el reconocimiento de los cuerpos aún se trabaja con los consulados y embajadas de Colombia y Venezuela.
En Colombia se investigan las circunstancias en las que se dio el viaje a Ecuador. En ese país, las familias contaron que sus allegados obtuvieron el paseo de forma gratuita.
Sobre las víctimas extranjeras, las autoridades señalaron que se abrió un canal de comunicación directo con sus familias. Sin embargo, hasta este miércoles pocos parientes habían podido llegar a la morgue. Por la mañana, únicamente se acercaron los allegados de dos ecuatorianos, de 3 y 15 años. Ellos hicieron los trámites para llevarlos a Lago Agrio, en Sucumbíos.
Ángel Guerra, tío del adolescente, contó que sus parientes estaban de paseo y que iban de vacaciones a Quevedo.
Eduardo Febres Cordero es presidente de la Fundación Venezolanos en el Exterior. Él también acudió a la morgue para ayudar en el reconocimiento de sus compatriotas. Allí aseguró que solo uno de sus coterráneos sobrevivió. Explicó que sus compatriotas migraban debido a la crisis que afecta a su país. “Su destino final era Perú”, indicó.
El dirigente aún se preguntaba cuáles fueron las causas que provocaron el percance vial.
Esa respuesta se conoció a las 10:00, en la Asamblea Nacional. Allí, el jefe de Accidentología de la Policía, Julio Barro, detalló que las pericias revelaron que se trató de una “falla mecánica en el sistema de frenos” del bus. Eso generó que el vehículo tomara velocidad y no pudiera detenerse. Barro dijo que el estudio fue remitido a la Fiscalía, para que determinase las responsabilidades de los conductores.
La Policía sospechaba que el bus tenía dos choferes. Uno de ellos resultó herido y tras ser asistido fue trasladado a la Unidad de Flagrancia. Allí, un juez dispuso su prisión.
Todos los datos del siniestro también reposan en la Comisión Especial de la Asamblea, que está encargada de las Reformas a la Ley de Tránsito. Ese organismo es presidido por Fafo Gavilánez. El legislador apoya la iniciativa de implementar más radares, pero asegura que esa es una solución es solo coyuntural.
Este Diario hizo un requerimiento de información al Ministerio de Transporte el martes 14 de agosto. Ayer respondió que se estudia el proceso de instalación de radares a escala nacional.
Guillermo Abad, miembro del Pacto Nacional por la Seguridad Vial, indicó que los radares ayudarán a disuadir a los conductores temerarios, pero afirma que es necesario actualizar estos aparatos con tecnología láser. Además, cree que el uso de radares no resolverá de forma integral las causas de la accidentalidad vial.
En el lugar donde impactó el bus todavía hay estragos. Cuatro casas están destruidas y sus propietarios no saben a quién acudir para que los indemnicen. Los escombros del autobús están a un costado de la vía. Los afectados colocaron telas y plásticos en las paredes rotas para protegerse del frío.
En las noches dicen que tienen miedo, pues aún reviven las escenas y los gritos de los pasajeros cuando el bus se volcó.
