Redacción Sociedad
Para los maestros fiscales y particulares, las vacaciones terminaron en la primera semana de este mes. Desde el martes 11, en los planteles públicos, ellos se encargan de matricular a los estudiantes, revisan el distributivo de paralelos y planifican.
Pero este año, la anunciada evaluación docente, que se realizará en octubre en los establecimientos de la Sierra y Amazonia, ha cambiado la rutina.
173 444 maestros
fiscales, fiscomisionales y particulares existen en el país, según el Censo de 2008.Así, las responsabilidades de las seis maestras y la directora del Jardín de Infantes Isolina Viteri de Arregui, de Chimbacalle, en el sur de Quito, concluyen en la mañana. Sin embargo, la semana pasada ellas trabajaron por su cuenta, de 14:00 a 18:00.
Melania Guamán, una de las docentes parvularias, de 54 años de edad y 23 en el magisterio, cuenta que se organizaron para capacitarse. Este es uno de los centros que será evaluado.
Por ello, las profesoras buscaron una capacitadora de la Federación de Establecimientos Educativos Católicos (Confedec) y armaron un taller, por el cual cada una paga USD 25.
“En estos días he recordado a los papás de la pedagogía, Jean Piaget y María Montessori. También aprendí algo más sobre la puericultura (el desarrollo, el cuidado y enfermedades de la niñez)”, indica.
Con 23 años en el magisterio y una licenciatura en Educación lograda hace nueve años, Guamán dice necesitar clases de informática. El conocimiento en herramientas tecnológicas le hace falta incluso para inscribirse en los cursos gratuitos de capacitación que ofrece el Ministerio de Educación, cuyo registro se hace de modo digital.
María Montoya, de 52 años, da clases en el Jardín de Infantes Gabriela Mistral, en el cantón El Chaco, de Napo. Se costeó alimentación y alojamiento para ser parte de este curso en la capital. Ella no se prepara para un examen.
Cree que debiera haber “un gimnasio para ejercitar el cerebro del maestro, así como existen para cultivar el cuerpo”.
Montoya aprovechó las vacaciones para participar de un club de danza en su tierra, tener más tiempo para la familia y llenar las guías de su posgrado a distancia de la Universidad Tecnológica Equinoccial. Ya se inscribió en otro sobre Desarrollo de las inteligencias en la Universidad Nacional de Chimborazo.
A Olivia Espín, profesora de séptimo de básica de la escuela María Elena Salazar, del barrio Las Tolas de Pomasqui, también se le acabó el período de descanso. La semana pasada acudió a la capacitación de ocho horas, realizada durante dos días, en la escuela Rosario Murillo, en el barrio La Florida. El tema fue Enfoque de los Derechos la Niñez y Adolescencia en la Educación.
Lo organizaron la Dirección Provincial de Educación de Pichincha, el Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia, el Instituto de la Niñez y la Familia y la Fundación Ambiente y Sociedad. El plan es capacitar a 7 000 maestros de la Sierra.
“Es importante que conozcamos cómo actuar ante casos de violencia que sufren los alumnos. Muchos maestros nos hacemos de la vista gorda para no vernos inmiscuidos en problemas. Algunos residimos en el mismo sector en que se ubica la escuela y no queremos enemistades”, dice.
Pero ahora, Espín asegura haber entendido que el profesor debe denunciar este tipo de hechos en la Fiscalía y la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen)”.
Espín, graduada de normalista en el Colegio Manuela Cañizares y de licenciada en la Universidad Técnica de Babahoyo, considera que los cursos de capacitación deben ser continuos, no tan esporádicos. En estos días, en su escuela, con sus colegas revisa un texto para prepararse para la Evaluación Docente, aunque no están en la lista de la evaluación. “En el libro leí algunos ejemplos sobre lógica matemática, sinónimos, métodos y acuerdos ministeriales”.
Teresa Montalvo, del Jardín Rita Lecumberry, ubicado en la Mitad del Mundo, relata que en estos días, mientras el personal administrativo se encarga de las matrículas, los profesores se ponen al día para enfrentar el próximo período escolar.
“Estamos en la lista de instituciones a evaluarse y no hemos recibido capacitación del Ministerio ni de la Dirección Provincial. Durante las vacaciones pagamos USD 25 por un curso sobre pedagogía y didáctica de cinco días, de 14:00 a 17:00”.