Distribuidores trabajan en una aplicación móvil que reemplazaría a la canción del gas, en Quito

Los distribuidores de gas desarrollan una aplicación móvil para la entrega de las bombonas. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO

Los distribuidores de gas desarrollan una aplicación móvil para la entrega de las bombonas. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO

Los distribuidores de gas desarrollan una aplicación móvil para la entrega de las bombonas. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO

Desde diciembre del 2016, los vehículos distribuidores de Gas Licuado de Petróleo (GLP) empezaron a usar en Quito una canción para alertar de su presencia a los ciudadanos. Esta situación, según el informe de veeduría ciudadana de contaminación acústica provocada por los camiones de venta de gas en todo el distrito Metropolitano de Quito, incumple la Ordenanza 213.

Fausto Andrade formó parte de la veeduría que tiene el aval del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) y que fue presentada ante la Comisión de Salud y Medio Ambiente del Municipio. Según Andrade, la normativa es clara y establece que solo los vehículos de emergencia pueden utilizar dispositivos sonoros.

Para la veeduría, que se realizó entre agosto del 2016 y marzo del 2017, se realizaron mesas de trabajo con el apoyo de la Secretaría de Ambiente del Municipio. Ahí se planteó la posibilidad de que los distribuidores de gas utilicen otros mecanismos en lugar de dispositivos sonoros.

Carlos Páez, concejal de Alianza País y miembro de la Comisión de Ambiente, anunció, a través de redes sociales, que la veeduría “ratifica que el bocinazo y la musiquita en repartidores de gas es ilegal”.

Gustavo Moncayo, presidente de la Asociación de Distribuidores de GLP en Quito, adelantó que el gremio trabaja en una aplicación móvil que reemplazaría a la canción. “La canción que se usa es provisional. Estamos trabajando en una plataforma de aplicación telefónica, esperamos que esté lista en aproximadamente tres meses. El problema es el tema de los costos”, aseguró.

El dirigente señaló que la idea es que los mismos distribuidores administren la plataforma y manejen la información del software. Moncayo recordó que en diciembre de 2016 llegaron a un acuerdo con el Municipio para que se use la canción de forma provisional por seis meses.

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