Derechos Humanos y presos políticos

Ma. Anunzziata Llerena N.

Es realmente inconcebible que existan países patrocinados por algunos Estados, que siendo miembros de las Organización de las Naciones Unidas, cuya Declaración de los Derechos Humanos ha sido suscrita por todos los Estados que la integran, en los que se infringe constantemente casi todo el contenido de dicha Declaración Universal, en vez de ser sancionados mediante la expulsión definitiva ya que bien pueden ser denominados como Estados no solo infractores, sino más aún como delincuentes que contravienen dicha Declaración, al mantener partidos únicos en el gobierno como la Alemania Hitleriana o la Rusia Estalinista, felizmente ya superados por la Historia.

La muerte de un ciudadano gracias a la tortura y la criminal represión en el país caribeño, esclavizado en nombre de una revolución ya traicionada por la dictadura miserable que existe, debe hacer reflexionar a todos los gobiernos que se presumen democráticos en el mundo.

Largo caminar
Yolanda Granja, presidenta, Lucy Mendoza, secretaria

Afepaz es la Asociación Femenina por la Paz, que en este mes celebra su XXII aniversario, donde un grupo de damas dedicadas a trabajar silenciosamente en bien de la niñez, de la mujer, amor al ciudadano, amor al país, amor a la lucha mas no a la guerra, buscando siempre  la superación honesta; promocionamos y promovemos talleres, paneles sobre los derechos humanos, mejoramos destrezas, habilidades y capacidades de las mismas socias.

Actualmente, estamos empeñadas en un gran proyecto de sensibilización y capacitación a la comunidad educativa sobre la violencia como generadora de la violación de los Derechos Humanos.

Carta preocupante
Carlos Salvador G.

Sumamente preocupante la carta al Director del Sr. Rubén Díaz Peralta (martes 23 de febrero), en la cual se recrimina enérgicamente a Diario EL COMERCIO por la publicación en la portada del 19 de febrero de la inclusión, por parte del GAFI, del Ecuador entre los países  con control deficiente en el lavado de dinero, así como también protesta enfáticamente porque en esa misma portada se informa de la reunión convocada por el Sr. Carlos Vera.

Y digo preocupante porque esta carta pone, una vez más, en evidencia la posición de quienes siguen la línea oficialista, es decir, que se debe negar o al menos minimizar todo aquello que comprometa la imagen del Gobierno, aun cuando sea una verdad irrefutable o una situación de trascendencia y que se la enfoque de una manera objetiva y ecuánime.

De igual manera, implica la estigmatización y el desprestigio hacia quienes pretenden presentar alguna oposición a los designios de los ‘dueños de la verdad’.

Me imagino que esta posición es similar a los objetivos consignados en la proyectada Ley de Comunicación, lo que implica que de ser ella aprobada no tendremos la menor posibilidad de conocer las acciones negativas del Gobierno y mucho peor, censurarlas.

Por último, el Sr. Peralta hace irrisión de la posible pérdida de la inversión extranjera debida a esta inclusión, pasando por alto que, precisamente, ha sido esta inversión la que ha permitido que muchos países subdesarrollados hayan superado su ancestral lacra de miseria y postergación (Singapur, Corea del Sur, Taiwán, la misma Chinca, Chile, etc.).

Tardó zapatero
Pablo Chafla Martínez

En este artículo de título tan llamativo “Lula se ahuevó”, el cual comparto, existe una imprecisión que cabe la pena resaltar. El articulista Fernando Larenas, en relación a la lamentable muerte del disidente cubano  a manos de la dictadura castrista, pone como ejemplo la “firme condena del socialista Rodríguez Zapatero” frente a la posición contemplativa del presidente Lula. Cabe aclarar al señor Larenas, que la supuesta firme condena del presidente español se dio únicamente luego de que la presión mediática, a la que se vio sometido en España, le obligó.

Esta presión se desencadenó a causa de su tibia intervención en la sede de Unión Europea, precisamente en un foro sobre Derechos Humanos, en la que Zapatero no tuvo la entereza, ni el valor de condenar directamente la muerte del cubano Orlando Zapata.  La izquierda siempre tiene la tendencia a mirar a otro lado cuando se trata del paraíso quimérico castrista, ya sea esta europea o latinoamericana. No es solo cosa de Lula, Chávez o Correa, por desgracia la desvergüenza entre la izquierda es más amplia, señor Larenas.

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