La victoria de Deportivo Quito sobre Deportivo Cuenca le dio un respiro al técnico Juan Carlos Garay. Tras el pitazo final, el estratega salió felicitado, abrazado por sus pupilos y colaboradores. Esta imagen contrastó con la del pasado miércoles (26 de marzo de 2014), cuando tras el empate con Emelec abandonó la cancha raudo y mirando al césped.
Sus expresiones también cambiaron en la conferencia de prensa. La tarde del sábado (29 de marzo de 2014) lució sonriente. Su rostro denotaba satisfacción y sus palabras estuvieron cargadas de optimismo. “El equipo está comprometido en buscar los resultados que necesitamos”, destacó Garay, quien dirige por primera vez como estratega principal en la Serie A.
La clave de esta victoria fue la inclusión en la delantera del argentino Jonathan Hansen, que fue el socio ideal de Carlos Garcés. Entre los dos complicaron a la zaga cuencana, alternándose dentro del área.
Además, cuando Carlos Feraud está prendido, el Quito funciona mejor. De sus pies salieron las jugadas claves y uno de los mejores goles de la undécima fecha, cuando hizo una pared con Hansen y pateó desde fuera del área.
El Quito también parece que encontró al reemplazante ideal de Luis Checa en Luis Romero, quien anotó su primer gol de cabeza de la temporada, en un tiro de esquina. El zaguero dispuso de otras opciones en los lanzamientos con balón detenido, al puro estilo del hoy defensor de Barcelona.
Mientras que el cuadro austral vive una realidad completamente adversa. Sigue en el fondo de la tabla, a pesar de que cambió de entrenador. Guillermo Duró lamentó la situación de su plantel y solo ofreció trabajar.