Redacción Cultura
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Desde ayer, hasta el 7 de diciembre, la danza en Ecuador deja de manifestarse sobre las tablas, para proyectar sus coreografías en la pantalla. La Fundación Arig organiza el primer Festival Videodanza Ecuador, bajo la dirección de las bailarinas Josie Cáceres y Tamia Guayasamín.
Selección andina
Por Ecuador, se muestran los trabajos: ‘Dentro/Fora’, ‘El legado de una ilusión’, ‘Acompasadas a pedazos’, ‘Anatomía del espacio…’, ‘Busco un ser humano’, ‘Cuando tú te hayas ido’, ‘Dr. Araña’, ‘Ingente transitoplasma’, ‘La pera que me comí ayer’, ‘Neblina’, ‘Que se calle???’, ‘Sin destino fijo’, ‘ Untershusung N 02…’ y ‘Vigorexia – capítulo 1’.
Por Colombia, se proyecta ‘Burnt’, ‘Entre líneas’, ‘Lento’, ‘Más se olvida’, ‘Soutenu’, ‘Tinta’ y ‘1580/m2’.
Por Venezuela, estará la cinta ‘Conexiones’.
Por Perú, se muestran los documentales ‘Laboratorio’ y ‘Diálogos’, de Perú en danza 2008 y ‘Mirella Carbone – tres procesos creativos’.
Por Bolivia, el filme ‘Ilustreimaginario’.
Un encuentro donde la expresión corporal y la audiovisual se unen y se complementan en un nuevo lenguaje, uno contemporáneo que abre reflexiones alrededor del cuerpo y el movimiento. Una dimensión híbrida que existe, exclusivamente, durante los instantes que la creación coreográfica se plasma en video.
Aunque la videodanza no es el registro de una función, la indefinición parece ser una de las características más notorias de esta manifestación: ¿una concepción escénica o una visual? Justamente, una reflexión similar motivó la conferencia de la realizadora y bailarina brasileña Luciana Ponso, que abrió la cita enQuito. Las actividades luego se realizarán en Guayaquil, Ambato, Cuenca, Loja y Esmeraldas.
“Las cosas más importantes en este lenguaje son las formas de pensar la danza, el cómo dar un sentido de composición coreográfico, que no necesariamente implique al cuerpo”, dice Ponso, quien además dicta un taller de creación de videodanza.
En lo referente a géneros y estilos, no existen categorías porque este lenguaje es abierto y cada artista presenta formas distintas de hacer videodanza, pues – según Ponso – cuerpo, cámara y pensamiento son indisociables, tienen que caminar juntos.
Para este encuentro, Arig abrió una convocatoria a nivel regional, de la cual se escogieron 26 trabajos audiovisuales, los mismos que integran la Muestra andina (con participación peruana, colombiana, venezolana, boliviana y nacional). La selección mantuvo un carácter inclusivo. “La idea era realizar una mirada panorámica para conocer el nivel en el que estamos”, señala Guayasamín.
A esa selección, se suman las categorías, Danza en foco (con cintas que se incluyeron en el festival homónimo en Brasil) y Paisajes coreográficos, con filmes franceses. Todas las funciones son gratuitas.
La programación también incluye espacios de discusión sobre este lenguaje, que abre las puertas para la investigación y la experimentación, hacia una refrescante mirada sobre el desarrollo de las artes escénicas y performáticas.
Si bien, en el país han habido demostraciones esporádicas de esta manifestación artística, el I Festival Videodanza Ecuador concreta un espacio para su producción y difusión.