Carlos Michelena no ha vuelto a presentarse en el parque de El Ejido desde que comenzó la pandemia. Foto: Archivo/ElComercio
Desde que empezó la pandemia del covid-19, el actor Carlos Michelena no ha regresado al parque de El Ejido para presentar su espectáculo cómico. Hace unos meses adaptó un espacio en su taller teatral ubicado en la calle Los Ríos, en Quito. Allí montó su primer show en línea, al que llamó ‘De pijamada con el Miche’.
¿Cómo ha vivido la experiencia de presentarse en formato digital?
La he vivido de una forma extraña por las circunstancias que estamos viviendo. Montar una obra en este formato ha sido un reto y un aprendizaje, porque es complejo sostener un espectáculo de una hora y media si tienes un espacio reducido para actuar.
¿Pero usted ya tenía el antecedente de haber trabajado en la televisión?
Sí, pero no es lo mismo. ‘El toque del Miche’, que salía en el noticiero, duraba dos o tres minutos. Era un libreto hecho para el espacio editorial de ese día.
¿Seguirá presentándose en internet o volverá a su “oficina”, en el parque?
Regresaré al parque cuando las autoridades dejen de ser tan incoherentes. Cómo es eso de que permiten que las personas vayan a las playas en montonera y regresen contagiados y solo dejan que los artistas hagamos espectáculos en salas de teatro con un aforo de 30%. Con ese dinero, a duras penas sale para pagar la factura de la luz. El otro día quise salir al parque y me cayó la ley. Si el alcalde del grillete no deja que los informales podamos trabajar honradamente cómo vamos a sobrevivir.
¿Qué es lo que más añora de las funciones presenciales?
Más que nada extraño la presencia del público y sus reacciones. También a las vendedoras de frutas, de arepas con café, de mote con hornado, de agua de coco; disfrutar del parque y del sol; y los momentos de improvisación de cada espectáculo. Todo eso hacía que uno se sienta retroalimentado. En el parque, a veces, uno también podía ser como un puente para la gente que ese día necesitaba para una receta, o para el que llegaba a la capital y necesitaba saber dónde podía comer o dormir.
¿Por qué para ‘De pijamada con el Miche’ decidió dejar de hablar de temas políticos?
No dejé de hablar de temas políticos, porque no se puede separar la política de la vida cotidiana. Lo que hace el comediante con la desgracia es transformarla en ironía y en motivo de risa. Cómo no voy a hablar de lo que está pasando con esta enfermedad y de cómo los políticos la están manejando.
¿En este año de pandemia ha creado personajes nuevos?
Claro, mi nuevo personaje es el Coronavirus ¡Yo soy el Coronavirus, y nadie me quiere a mí, no tengo más amiguitos porque ya me los comí! Siempre hay que crear pensando en lo que está pasando en el día a día. Hay que recordarles a los políticos sinvergüenzas que la verdadera pandemia es la demagogia con la que se manejan. Eso no solo lo digo yo. Desde que somos república siempre han existido personas que han hablado del abuso del poder.