Redacción Deportes
Aprendió a dar sus primeros pasos junto a los deportistas de Olimpiadas Especiales de Ecuador.
Cuando tenía 3 años, Nicolás Cueva, ahora entrenador de tenis, desfilaba junto a ellos en las ceremonias de inauguración previa a las competencias.
Cuando era niño, Cueva acudía a los torneos motivado por su padre Héctor, presidente de la Fundación de Olimpiadas Especiales. A los 13 años, ya era voluntario de la institución y siempre apoyaba a los deportistas en sus competencias. Hoy, a sus 26 años, es uno de los entrenadores más activos y tiernos con sus pupilos.
Cueva se entrena con Henin Zambrano, Evelyn Jiménez y Jean Carlos Santana, tres de los créditos ecuatorianos que participarán desde el 19 de este mes en los Latinoamericanos de Olimpiadas Especiales que se realizarán en Puerto Rico. El entrenador junto a otros cuatro técnicos: Patricia Sánchez, de atletismo; Santiago Rosero, de triatlón; Cristian Lara, de natación y Álex Reinoso de gimnasia, se encargan de entrenar y ‘mimar’ a los jugadores que participan en Centroamérica.
Cueva conversa continuamente con sus “muchachos”, como les dice de cariño. Les corrige los movimientos con la raqueta y felicita cada punto que logran. Sus jugadores lo abrazan y besan sus mejillas como una muestra de agradecimiento por su ayuda.
Antes de convertirse en entrenador nacional de tenis, él colaboraba en la entrega de los refrigerios y recibía a los atletas en la meta. Ahora, hace similares actividades, pero a la vez dirige a los jugadores.
Patricia Sánchez, de 27 años, también se vinculó a Olimpiadas Especiales como voluntaria, impulsada por su esposo Milton Antamba.“Al principio tenía un poco de recelo, no sabía cómo tratarlos. Pero después aprendí y ahora me llevó bien con mis alumnos”, recuerda la entrenadora de atletismo, que tiene la piel trigueña y contextura delgada.
Sánchez lleva dos años al frente de la Selección Nacional de Atletismo y ese tiempo le ha sido suficiente para encariñarse con sus ochos dirigidos: cuatro varones y cuatro mujeres. Por momentos, ha relegado a un segundo plano las actividades del hogar.
“El tiempo vuela cuando estoy con mis chicos, ya no puedo arreglar la casa o limpiar los polvos. Ahora solo cocino y me encargo de las tareas de mis hijos”, comenta entre risas la entrenadora, que actualmente cursa el primer semestre en la Facultad de Comunicación Social de la Universidad Central del Ecuador (UCE).
Santiago Rosero también dejó de entrenar triatlón por entregarse 100% a la ayuda de los deportistas especiales. El entrenador está feliz y no oculta su cariño por uno de sus más grandes campeones: Santiago Montenegro, quien es campeón mundial. También entrena a Juan Proaño, quien también ha mostrado grandes condiciones para este deporte.
Rosero, de 24 años, solo tienen buenos recuerdos desde que llegó a Olimpiadas, en 2006. Uno de ellos y el que logra quebrar su voz es cuando evoca la ocasión en que Montenegro le pidió la bendición, minutos antes de saltar a la pista para competir.
“Santiago me rompió el corazón. Me dio tanta ternura que me fue imposible negarme a su petición. Ahora, me pide la bendición cada que compite”, dice muy conmovido el entrenador Rosero.
Ecuador irá a los II Juegos
27 deportistas participarán en los II Juegos Latinoamericanos de Olimpiadas Especiales, que se realizarán del 19 al 27 de este mes, en Puerto Rico.
En ese certamen intervendrán 1 200 atletas de 35 países, los mismos que competirán en 11 disciplinas olímpicas. La delegación ecuatoriana participará en atletismo, gimnasia, natación, tenis y en las pruebas de triatlón.
En los I Juegos Latinoamericanos que se realizaron en El Salvador, en 2006, Ecuador obtuvo 11 medallas de oro, nueve de plata y 13 de bronce, atletismo, natación, gimnasia, fútbol y tenis.
La delegación tricolor viajará el miércoles 17 de febrero en compañía de sus técnicos.