El plantón se concentró en los bajos de la Gobernación de Azuay, en Cuenca Foto: Lineida Castillo / EL COMERCIO
Juan Bermeo, de 27 años, fue asesinado el domingo 7 de diciembre de 2020. En su nombre y de todas las víctimas, la tarde de este jueves 10 de diciembre del 2020 se cumplió un plantón en contra de la inseguridad en Cuenca.
Bermeo fue apuñalado cerca de las 04:30 del domingo 7 de diciembre, en las inmediaciones del parque de Miraflores, en el norte de la ciudad, cuando hacía deporte. Su familia relató que él acostumbraba a salir a las 04:00 a correr por una hora y ese día no retornó.
Cuando salieron a buscarlo por la ruta, a eso de las 06:30, se encontraron con la Policía quien les informó que trasladaron a Bermeo a una casa de salud porque estaba mal herido y minutos más tarde confirmaron su muerte.
Había recibido una puñalada en el corazón y sus manos tenían huellas de cortes, por lo que se cree que se defendió. Un día antes, Bermeo le contó a su esposa que dos hombres en moto intentaron asaltarlo, pero que corrió y escapó de los desconocidos.
Juan Bermeo dejó a dos niños en la orfandad, de dos meses y cuatro años de edad. Su familia, allegados y amigos lo lloran y piden a las autoridades “Justicia para Juan”. Esa consigna sonó como eco en el plantón que se cumplió en los bajos de la Gobernación de Azuay, en el Cetro Histórico.
Los participantes llevaban carteles con frases como “Cuenca sangra, basta ya”, “Queremos seguridad para nuestras familias”, “Tenemos derecho a una vida tranquila”, entre otras. La familia reclama a la Fiscalía y Policía celeridad en las investigaciones.
Mónica Rodas, cuñada del difunto, dijo que hasta este jueves 10 de diciembre no se había identificado a los responsables y que tampoco hay registros de las cámaras de video vigilancia de la Central de Emergencias ECU-911 Austro. Por eso, insistió que volverán a las calles hasta que se ubique y detenga a los responsables.