El director del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner (c) en una rueda de prensa, el miércoles, en México. Foto: EFE
Ecuador volvió su mirada al Fondo Monetario Internacional (FMI) luego de un largo período de distanciamiento.
Esto se da en momentos en que el país ha recurrido a varios organismos multilaterales en busca de créditos blandos y rápidos para afrontar la reconstrucción de las zonas devastadas tras el fuerte terremoto del 16 de abril, que azotó principalmente a las provincias de Manabí y Esmeraldas.
Analistas consultados por este Diario consideran que Ecuador podría acceder a una línea de crédito del FMI de entre USD 187 millones y USD 370 millones. El monto estará determinado por la severidad de los daños, lo que será evaluado por el FMI antes de aprobar el desembolso.
El monto al que accedería Ecuador también está determinado por la cuota que le corresponde al país como miembro del FMI. Esta cuota asciende a unos USD 500 millones anuales, según datos del FMI.
El ministro de Finanzas, Fausto Herrera, confirmó a este Diario que “se está trabajando (con el FMI) en esa línea sin condicionamientos”.
El multilateral dispone de una línea de crédito de rápido desembolso para atender las urgencias de recursos de los países afectados por desastres naturales.
Según explica el organismo, se trata de un préstamo para proveer de asistencia financiera inmediata con un condicionamiento limitado. “Ese tipo de préstamo está destinado para países con bajos ingresos, que enfrentan una necesidad urgente”, detalla el FMI.
Hasta antes del anuncio de la solicitud de crédito al FMI, el Gobierno había confirmado préstamos por USD 616 millones provenientes de otros multilaterales. El presidente Rafael Correa explicó el sábado pasado que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) comprometió USD 300 millones, destinados para gasto corriente; USD 166 millones de la Corporación Andina de Fomento, para obras de reconstrucción; y USD 150 millones del Banco Mundial (BM) para tareas de recuperación económica por desastres naturales.
Para el exministro de Economía, Mauricio Pozo, el monto del préstamo que otorgue el FMI podría ser similar al que entregan los otros multilaterales en estos casos.
“El monto puede acercarse a lo prestado por el BM”. Aunque la línea de crédito del FMI es de libre disponibilidad, Pozo considera que el organismo buscará cerciorarse de que el préstamo se destine para la emergencia.
“Eso no quiere decir que condicione la ayuda a la creación de un fideicomiso. Quizás puedan sugerir que se abra una cuenta en el Banco Central”.
El ministro de Relaciones Exteriores, Guillaume Long, manifestó ayer en una entrevista en Ecuavisa, que el Gobierno no está desesperado por créditos. “Hay que ver si son créditos en condiciones dignas, si no conllevan condicionamientos inaceptables, si la tasa de interés está bien”. Tampoco que este tipo de financiamiento vaya en desmedro del Plan del Buen Vivir.
El Canciller indicó, no obstante, que el país está explorando líneas de crédito con EE.UU., Europa, China y otros.
Según el FMI, su línea de crédito Rapid Credit Facility se entrega sin intereses, con 3,5 años de gracia y a un plazo de 10 años. “Son condiciones sumamente atractivas, precisamente por tratarse de una emergencia”, consideró el analista Walter Spurrier, director de la revista Análisis Semanal.
El Fondo Monetario Internacional ya hizo una serie de recomendaciones al Gobierno en octubre del 2015, cuando publicó su informe anual sobre Ecuador, tras la revisión de la economía del país. Técnicos del ente estuvieron en el país hace dos semanas.
Spurrier, quien dijo haberse reunido con el equipo técnico del organismo, explicó que el FMI está nuevamente evaluando cómo marcha la economía nacional para un nuevo informe anual.
La cronología
2007
El presidente Rafael Correa decidió liquidar todas sus deudas con el FMI al que cuestionó por aplicar “recetas inapropiadas”. “No queremos saber más de esa burocracia internacional”, dijo.
2008
El Gobierno ecuatoriano suspendió la revisión anual de las cifras de la economía del país por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), lo cual se mantuvo hasta mediados del 2014.
2014 y 2015
Ecuador buscaba colocar bonos y reabrió las cuentas fiscales al FMI. Las consultas con el ente se reanudaron en 2014, pero se llevaron a cabo en Washington. Desde 2015, ya se hacen en Quito.
2016
Tras casi 10 años de relación distante con el multilateral, el Ecuador solicitó un crédito al FMI para atender la emergencia del terremoto. Será sin condicionamientos, según autoridades.