Correa inspeccionó la ex Categ y anunció 40 megavatios más

Redacción Guayaquil

El presidente Rafael Correa realizó ayer al mediodía  una inspección sorpresiva a la Eléctrica de Guayaquil, en el norte de la ciudad.

Allí se encontró con una manifestación de los empleados del Comité de Empresa de la  Eléctrica Guayaquil  (ex Categ) que paralizaron sus actividades en reclamo de beneficios laborales.

Cuatro vehículos canasta  se ubicaron en la puerta principal de la institución. Desde allí   los trabajadores gritaron “somos privados, no somos del Estado”.

Eran alrededor de 100 empleados,  que además cuestionaron el trabajo de Óscar Armijos, administrador de la empresa. William Moreno, secretario del Comité de Empresa, denunció  supuestos privilegios para el administrador.

Mientras eso ocurría en los exteriores, en el  interior del edificio, Correa dio una improvisada rueda de prensa.  Anunció para  los próximos 15  días  la reparación de una de las termoeléctricas paralizadas de la Eléctrica Guayaquil  con lo que se  generarán 40 megavatios más de electricidad. 

Además dijo que seis de las siete turbinas  portátiles compradas en Houston estarán en las centrales térmicas de El  Salitral y  Pascuales. Con ello se espera eliminar los racionamientos, dijo. 

La Eléctrica de Guayaquil  dejó de ser una institución privada en junio pasado, vía decreto ejecutivo. Por su parte, los empleados que se mantienen desde la anterior administración  reclaman beneficios laborales. 

Ante los reclamos de los trabajadores, Correa  anunció sanciones penales y laborales.  “... lo que están haciendo es interrumpiendo un servicio público. Eso es un delito tipificado en el art. 158 del Código Penal, peor en emergencia eléctrica”. Correa dejó  la entidad en medio de la protesta de los trabajadores.

Durante la mañana acudió a la Corporación Financiera Nacional (CFN), en el edificio del Banco Central del Ecuador (BCE). 

En los exteriores se encontró con  la protesta de los estudiantes del ITAE en demanda  de recursos del BCE. Correa les planteó como solución    presentar  un proyecto cultural, así el Gobierno lo financiaría   y el próximo año se integran  al Sistema Nacional de Cultura.

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