Apenas 6 cooperativas circulan con toda su flota

En la av. Rodríguez Bonín, en el oeste, los usuarios esperaron más de 15 minutos por la llegada de las líneas de buses. Fotos: Wladimir Torres / EL COMERCIO

En la av. Rodríguez Bonín, en el oeste, los usuarios esperaron más de 15 minutos por la llegada de las líneas de buses. Fotos: Wladimir Torres / EL COMERCIO

En la av. Rodríguez Bonín, en el oeste, los usuarios esperaron más de 15 minutos por la llegada de las líneas de buses. Fotos: Wladimir Torres / EL COMERCIO

Solo seis de las 62 cooperativas de buses de Guayaquil funcionan con el 100% de su flota. El censo de unidades y la vigencia de la tarifa del pasaje de USD 0,30 marcan el inicio de una nueva etapa en la transportación urbana.

Una vez concluido ese proceso, desde ayer solo circulan las unidades que pasaron la revisión de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM). Durante un mes los buses fueron sometidos a cambios para cumplir con 10 requisitos necesarios para obtener el nuevo Registro de la Autoridad de Tránsito Municipal (Ruat).

En distintos sectores de Guayaquil, el incremento del pasaje generó diversas reacciones. Además, hubo quejas por la demora en las frecuencias de buses de ciertas cooperativas y por la falta de paraderos establecidos.

Según la ATM, 2 069 buses tienen el Ruat, una cifra por debajo de los 2 600 que se considera necesaria para brindar un servicio óptimo en la ciudad. El censo determinó que 22 cooperativas trabajan entre el 50% y 80% de su flota y ocho con menos del 50%.

Ayer a las 06:00 en las calles 17 y Portete, en el Suburbio oeste, algunos usuarios se quejaban. La molestia era porque la línea 118 llegaba con un intervalo de hasta 15 minutos. Esos buses son de la cooperativa Río Amazonas que tiene 92 unidades, de las cuales solo 18 no recibieron el Ruat.

Bertha Tumbaco se mostró en contra del incremento de USD 0,05 en el pasaje. Dijo que afecta a su presupuesto y que los transportistas no están cumpliendo con uno de sus compromisos: mejorar la atención al público.“El aumento impacta en la economía familiar y es chocante que haya que pagar más por un servicio que no es bueno. No paran donde debe ser y dejan a la gente donde les da la gana, a los estudiantes no les paran bola y se van de largo”, se quejó.

Mientras, Carlos Leitón tenía una cara larga porque llegaría con media hora de retraso a su trabajo, en el sur de la ciudad. “Estoy esperando la 118, pero está demorando casi 15 minutos. En horas pico, como ahora (07:30), no demora más de siete minutos. Como no hay suficientes buses ya están llegando muy llenos y no nos dejan subir”.

Un panorama similar se vivió en la av. José Rodríguez Bonín, frente a la Policía Judicial, en el suroeste del Puerto Principal. Laura Ramírez, junto a dos señoras, cuestionó la falta de paraderos. “Uno tiene la voluntad de pagar cinco centavos más, pero deben mejorar el servicio. A los estudiantes ni los recogen, a nosotras casi que nos hacen bajar al vuelo. Así no se puede progresar como ciudad”, criticó Ramírez.

Andrés Roche, gerente de la ATM, afirmó ayer que “toda la ciudad está totalmente cubierta” por el servicio de transporte urbano. Sin embargo, reconoció que hay cuatro puntos en el norte y noroeste de Guayaquil que registran déficit de oferta. Por eso se hará una reasignación de rutas en la zona.

Según Roche, quizá los usuarios tuvieron la sensación de una menor cantidad de buses porque había un exceso de unidades. Eso reveló el censo.

“Como había exceso de buses, la ciudadanía se había acostumbrado más o menos a que el bus era taxi”. Era tal la cantidad de unidades, que pasaban cada dos o tres minutos, cuando lo usual es de siete a diez minutos, explicó.

No obstante, el directivo agregó que para llegar a los
2 600 buses que requiere la ciudad, la ATM recibirá solicitudes para nuevos cupos. Además, continuará el censo en el Centro de Revisión Técnica Vehicular, en la vía a Daule, en el noroeste de Guayaquil.

La ATM aprobó la circulación de 50 nuevos buses. Pero los dueños esperan la confirmación crediticia de la Corporación Financiera Nacional.

La Agencia de Tránsito desarrolló 20 operativos simultáneos la mañana de ayer en distintos puntos para controlar que buses no autorizados prestaran servicio.

En el procedimiento se retuvo a 10 unidades, que pasarán siete días retenidos y recibirán una sanción de dos salarios básicos unificados.

Los conductores de esas unidades tendrán una reducción de 10 puntos en su licencia.

Andrés Villamar cuestionó que la ATM hubiera detenido su bus de la cooperativa La Unión. “Iba sin pasajeros y me dirigía a un taller para poder cumplir con los requisitos que piden en el censo, no estaba cobrando el nuevo pasaje”.

Roche comentó que ahora vendrá una fase de reordenamiento de los recorridos urbanos en la ciudad. En enero se prevé que funcionen los tres primeros corredores de tránsito en los que habrá paraderos específicos. En esa etapa las unidades deberán trabajar con sus puertas traseras.

En contexto

El Concejo Cantonal de Guayaquil aprobó el pasado 11 de julio el incremento del precio del pasado de USD 0,25 a USD 0,30. Ese valor no se modificaba desde hace 14 años. Los transportistas debieron cumplir con 10 requisitos para recibir el nuevo disco.

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