Cooperativa de transporte suma una segunda suspensión

oto: el comercio Los familiares de los fallecidos  llegaron ayer a  la morgue de Quito.

oto: el comercio Los familiares de los fallecidos llegaron ayer a la morgue de Quito.

La caída de un bus al abismo en la vía a Guayllabamba, el martes 7 de marzo, es el segundo accidente en el año con más víctimas mortales y heridos. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO 

La sala de la morgue estuvo llena. En el patio había más gente. Todos vestían de negro. Eran familiares de las 12 personas, que el martes murieron en el accidente del bus de la Cooperativa Flor del Valle.

A las 09:30 un forense salió de la morgue y mencionó los primeros cuatro nombres. La primera de esa lista fue Mayra Caicedo, una joven de 24 años, que viajaba sola en el bus que cubría la ruta Cayambe-Quito.

Su madre Mercedes Pineda se acercó al médico, quien le dijo que en 30 minutos le entregaría el cadáver. El mismo mensaje recibió el hermano de Darwin Flor, otra víctima del siniestro que se produjo en la vía Guayllabamba - El Quinche.

Darwin tomó el bus junto con su padre, en Otón, localidad cercana a Cayambe. Ahí trabajaba en una floricultora.

Los dos salieron a las 16:00 y se iban a su casa en Malchinguí. Allí le esperaba su madre, pero Darwin nunca llegó. A las 17:00 del martes, la Policía confirmó que él fue una de las personas que falleció.

El padre de Darwin se salvó, pero hasta el miércoles 8 de marzo del 2017 estaba en el hospital de Calderón. A esa unidad médica llegó con cortes en los brazos y un golpe en el pecho. La espalda también estaba lesionada y los médicos confirmaron que perdió los dientes producto del impacto, pues el bus perdió pista, chocó con una camioneta doble cabina y cayó a una quebrada.

El miércoles, en los exteriores de la morgue, los familiares aún se preguntaban qué provocó el siniestro. Unos decían que se quedó sin frenos y otros que iba a alta velocidad.

El jefe del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT), Julio Barba, señaló que hay indicios de que el bus invadió el carril. Pero para asegurar que fue por falla mecánica se analizarán los sistemas de frenos, dirección y de encendido del automotor.

Este es el segundo accidente en el año, con más víctimas mortales y heridos. El primero se dio en la vía Yahuachi-Jujan.

Allí dos buses y un auto se impactaron y fallecieron 20 personas. Tras el percance, el presidente Correa habló de “altos índices de accidentes” en el país. Llamó la atención a la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) y concluyó que esto se produce por la facilidad para obtener las licencias.

En esos días, el director de la ANT, John Hill, habló con este Diario y reconoció que aún estaba en marcha un proyecto para ajustar la entrega de este documento. En ese entonces dijo que se analizaba la posibilidad de aumentar las horas de práctica en los cursos para choferes profesionales, mejorar las mallas de las escuelas y actualizar el banco de preguntas. “Vamos a ser más rigurosos”, dijo.

Desde entonces no se ha hecho público información alguna. El 8 de marzo, en rueda de prensa, Hill dijo que investigará si el accidente del martes fue por una posible falla mecánica.

El miércoles, las familias de las víctimas lloraban, se abrazaban, se consolaban entre ellas y decían que los buses deben tener mayor control técnico.

El 8 de abril del 2016, el Gobierno también firmó un decreto para que la revisión técnica ya no sea dos veces al año, sino apenas una.

Ese cambio, vigente desde el 26 de abril del 2016, se contraponía con lo que el Mandatario estableció en el 2012, cuando expidió el Reglamento a la Ley de Tránsito. Allí el Presidente decía que la revisión vehicular tiene entre sus objetivos “garantizar las condiciones mínimas de seguridad de los vehículos, reducir la falla mecánica, mejorar la seguridad vial, la capacidad de operación del vehículo, reducir las emisiones contaminantes, y comprobar la idoneidad de uso.

Por ahora, la ANT suspendió 30 días la frecuencia Cayambe-Quito-Cayambe, de la Cooperativa Flor del Valle. Pero ya tenía una suspensión en el 2015, cuando dejó tres víctimas.

En el 2016, la ANT abrió 55 expedientes contra cooperativas que causaron siniestros y apenas siete fueron amonestadas. Según el ente, eso se debió a que los abogados de las empresas dilatan los procesos.

El 8 de marzo, el vicepresidente de la Cooperativa Flor Del Valle, Armando Solá, llegó al lugar del accidente. Allí mencionó que “hace poco” todos los buses de la empresa pasaron la revisión técnica. Por eso dijo que está sorprendido de la sospecha sobre la falla de los frenos.

El chofer está prófugo. Por casos como este, en la Asamblea reposa una propuesta del Ejecutivo para reformar el Código Penal y castigar con un año de cárcel (adicional al delito) a los fugitivos. En el documento, el Gobierno dice que Ecuador “sigue mostrando cifras preocupantes en la tasa de accidentabilidad, como en las víctimas fatales en las vías”.

En el 2016, en el país hubo 30 269 accidentes, que dejaron 21 458 lesionados y 1 967 muertos. Los heridos del martes están internados. Alejandra Sanguil permanece en terapia intensiva y no puede hablar. Ahí también se encuentra otra paciente, que está en coma y su hija de un año falleció.

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