Las puertas de las dos agencias de la Cooperativa de Ahorro y Crédito Acción Rural que funcionan en Riobamba, una ciudad andina del Ecuador, permanecieron cerradas y custodiadas por agentes de la Policía Nacional, el viernes 21 de agosto del 2015, por tercer día consecutivo.
Una supuesta iliquidez habría causado que los socios no pudieran retirar el dinero de sus ahorros ni sus pólizas vencidas. Esto causó una gran cantidad de rumores y la aglomeración de decenas de personas en los exteriores de las agencias.
El consejo de administración de la cooperativa propone la aplicación de un plan de contingencia según el cual la prioridad es conseguir recursos económicos para mejorar la liquidez, incluso si esto requiere la venta de algunos activos de la empresa, como los vehículos.
“Estamos buscando soluciones. Ayer nos reunimos, le solicitamos al gerente (Luis Aimacaña), que dé la cara, que se presente aquí y atienda a todas las inquietudes de los socios, pero él no vino”, reclamó Miguel Ángel Quito, miembro del Consejo de Administración y gerente de la sucursal en Guamote.
Según él, Aimacaña se encontraría en Ambato y se contactó vía telefónica con los miembros del consejo de administración. En esta conversación él habría indicado que retornaría a Riobamba y acudiría a la agencia matriz para ofrecer una rueda de prensa, pero esto no sucedió.
“Debido a su ausencia decimos nombrar a Nelson Vargas como gerente subrogante. Él deberá trabajar en conjunto con la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria (SEPS) para transparentar la situación de la cooperativa”, indicó Quito.
Una entrevista telefónica concedida a una estación radial de Riobamba, fue la única respuesta pública de Aimacaña. “Estoy consiguiendo los fondos que necesita la cooperativa para recuperar su liquidez, regresaré a la ciudad con el dinero”, señaló el pasado jueves, 20 de agosto.
Esta mañana Nelson Vargas, gerente subrogante, anunció que la cooperativa abriría sus puertas el jueves de la próxima semana, con el propósito de que los socios cancelen las mensualidades pendientes de sus créditos.
De hecho, las otras 16 sucursales que funcionan en Guayaquil, Cuenca, Ambato, Macas, Tena y otros cantones de Tungurahua y Chimborazo, solo se atendió para recibir pagos de créditos. “Es necesario que los socios continúen pagando sus haberes, eso nos beneficia a todos”, dijo Vargas.
La Superintendencia de Economía Popular y Solidaria entregará hasta el próximo martes su pronunciamiento oficial, después de obtener el informe de la situación económica de la cooperativa.
Esta mañana los funcionarios ingresaron a las oficinas de la agencia matriz para iniciar este trabajo, sin embargo no detallaron en qué consistirían sus acciones. El departamento de comunicación de esta entidad señaló que las acciones que se hacen, de momento, serían confidenciales.
Diario EL COMERCIO intentó obtener la versión del gerente Luis Aimacaña pero su teléfono celular está apagado.