El Ejecutivo anunció que El Aromo, donde se buscaba levantar una refinería, no es apto para hacer el proyecto. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El Gobierno tiene dos proyectos en materia de refinación de petróleo, puntualizó este jueves 22 de agosto 2019 el Ministerio de Energía. Uno es el proyecto de un nuevo complejo y, el otro, la mejora del complejo de Esmeraldas.
El titular de la Cartera, Carlos Pérez, anunció que el miércoles próximo (28 de agosto) se lanzará una convocatoria internacional para que las empresas que busquen invertir en la construcción de una nueva refinería –de 200 000 barriles diarios de petróleo (bdp)- presenten expresiones de interés.
El funcionario explicó que no se trata de una licitación, sino de un proceso con el cual el Gobierno busca evaluar la capacidad técnica, económica, licitud de fondos y balances de las empresas participantes.
La intención es tener una lista de potenciales interesados que puedan venir con capital para invertir y construir un nuevo complejo con altos estándares internacionales.
Los inversores tendrán la libertad de elegir el sitio para construir la planta. El único parámetro es que sea en un lugar cercano al océano Pacífico.
El Gobierno anunció que exigirá a las firmas que entreguen el combustible al precio del golfo de México, puesto en Ecuador; es decir, el país se ahorraría los costos de transporte. Si no existe una expresión de interés de empresas serias, el proyecto se descartará y los esfuerzos se centrarán en la repotenciación de la Refinería Esmeraldas, dijo Pérez.
La capacidad de la nueva refinería se sumará a la de Esmeraldas (110 000 bdp).
El Gobierno también analiza las dos alternativas para el actual complejo. Una apunta al cierre, que ha sido mencionada por Santiago Cuesta, consejero presidencial. La segunda opción, que es impulsada por la Cartera de Energía, es la repotenciación de la planta. Este plan busca evitar la emisión de gases al ambiente y obtener combustibles que cumplan con normas internacionales, como la Euro 5.
El Gobierno informó que hace unos días Shell visitó la planta y presentó un informe con recomendaciones.
Pérez, quien es el funcionario a cargo de la política energética, recalcó que no es partícipe del cierre del complejo. “No es una opción”, señaló.
El deber del Gobierno, señaló Pérez, es contrarrestar la contaminación, por esta razón se ha puesto en marcha una planta de azufre para mejorar las condiciones de la refinería.
La mejora a la planta de refinación se realizaría a través de inversión privada. El Ministro enfatizó que el Gobierno no tiene la capacidad económica para invertir en este proceso, por lo que Pérez impulsa la concesión de la administración a un privado.
En todo caso, el funcionario reiteró que no existirán despidos masivos en la planta de Esmeraldas.
Pero las propuestas no convencen a todos. Miller Quiñónez, representante de los trabajadores del complejo, cuenta con una propuesta para repotenciar la planta, sin necesidad de concesionarla ni cerrarla. La alternativa incluye levantar una unidad dentro del complejo, para tratar residuos y convertirlos en productos blancos, bajo norma Euro 5.
La inversión requerida podría llegar hasta USD 2 000 millones, pero podría financiarse a través de alianzas público- privadas o contratos por servicios específicos con financiamiento, explicó.
En contexto
Colectivos de Esmeraldas enviaron hace unos meses cartas al Presidente de la República, sobre la contaminación que genera el complejo refinador ubicado en esa provincia. Pidieron el cierre de la planta, que procesa el 70% de los derivados en el país.