Redacción Quito
Desde hoy se inician los operativos para sancionar a los taxistas ilegales.
Los controles estarán a cargo de la Policía Nacional y la Empresa Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Emmop). Los operativos se realizarán luego de que los taxistas legales solicitaron a las autoridades mayor regulación a este tipo de transporte. Ellos presentaron una petición formal amparada en la Ley de Tránsito en el art.57.
En ese documento se señala que “para operar un servicio comercial de transporte se requerirá de un permiso de operación, en los términos establecidos en la presente Ley y su Reglamento (…) los cuales serán prestados únicamente por compañías y cooperativas autorizadas y que cumplan con los requisitos y las características especiales de seguridad”.
Así, a partir de hoy se conformarán brigadas en la que participarán un oficial de la Policía, un fiscalizador de la Emmop y un veedor de los taxis ilegales.
Los controles serán permanentes de lunes a viernes, a través de dos grupos, que actuarán en la mañana de 06:00 a 09:00, y en la tarde de 15:00 a 17:00.
El Municipio no estableció perímetros de control, pues los operativos se realizarán de manera aleatoria. Los vehículos que no cuenten con el registro otorgado por el Municipio para circular en el Distrito serán trasladados hacia los patios de retención.
La Emmop cuenta con siete lugares para la retención de los autos. Estos están ubicados en La avenida Río Coca, sector La Y, La Mariscal, en el norte.
Los patios de retención del centro y sur son la ex terminal terrestre Cumandá, Gualaquiza, Rumichaca y Guamaní.
Los taxis legales pueden ser identificados porque poseen un adhesivo color naranja con el número de registro municipal. Además son de color amarillo y pertenecen a una compañía de taxis. Estas unidades deben utilizar obligatoriamente el taxímetro en todos los recorridos.
Según la Emmop, 9 de cada 10 personas utilizan taxis ilegales para movilizarse en el Distrito, sin tomar las precauciones. Estas unidades, a decir del Municipio, no poseen taxímetros, lo cual impide que los usuarios paguen lo que corresponde por cada carrera. Estos vehículos no tienen los registros municipales y no están pintados de amarillo.