Ayer, 21 de agosto del 2018, 300 personas asistieron a la primera mesa de trabajo, realizada por la Judicatura. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Para quienes se consideran víctimas de la persecución política, la reunión de ayer, 21 de agosto del 2018, con el Consejo de la Judicatura fue un momento histórico; “una luz al final de este oscuro túnel correísta”, dijo Mery Zamora.
La activista política fue una de las seis personas que participaron en la primera Mesa por la verdad y la Justicia.
El espacio fue organizado por la Judicatura y la idea era recopilar todos los expedientes en donde se usó la justicia con fines políticos.
Después, la Judicatura planea elaborar informes y presentarlos en las diferentes instituciones del Estado, para que se adopten las medidas de reparación a las víctimas.
“Ocho años de cárcel. Eso fue lo que esta mujer, esta madre, esta parvularia, tuvo que enfrentar. Fue una persecución cruel, despiadada y desmedida”, agregó Zamora.
En el auditorio del Complejo Judicial Norte, en Quito, en donde se realizó la reunión, los asistentes gritaban sus consignas en medio de los testimonios. “¡Fuera corruptos, fuera!”. “30S Nunca más”, se oyó.
Hasta esa mesa de trabajo llegaron representantes de movimientos políticos y activistas, como Ciro Guzmán, Yaku Pérez, el coronel César Carrión, la asambleísta Jeannine Cruz, Fernando Villavicencio, entre otros. Además, estuvieron los representantes de las asociaciones por las víctimas del caso del 30S. En total, a la sesión asistieron alrededor de 300 personas.
Pablo Castro, del caso Los 10 de Luluncoto, fue otro de los que contó cómo él y sus nueve compañeros terminaron presos y acusados de terrorismo, en marzo del 2012.
“En la época del correísmo eso podía ser considerado una reunión subversiva… para planificar todo un conjunto de actos en contra del poder”.
Así el joven inició su historia. Contó que en su caso, la Fiscalía, policías y jueces habrían cometido violaciones a la ley para procesarlos penalmente. Un ejemplo fue el parte de allanamiento que, según él, se elaboró después de que los agentes habían ingresado a la vivienda, en donde estaba reunido con sus compañeros.
“Los fiscales que fraguaron todo esto se encuentran hoy como notarios; los que nos negaron los recursos judiciales son jueces y siguen siendo parte de la Judicatura”.
Otra persona que tomó el micrófono fue el periodista Juan Carlos Calderón. Él explicó cómo fue enjuiciado después de publicar el caso El Gran Hermano, sobre los negocios que mantenía el hermano del expresidente con el Estado, junto con Christian Zurita.
El periodista recordó que en el juicio, el entonces presidente pidió una indemnización de USD 10 millones por daño moral. “Pese a que (Correa) no presentó una sola prueba del daño moral, la jueza dijo que habíamos afectado la espiritualidad del señor presidente, que nos habíamos situado en el umbral de lo ilícito”.
Óscar Ayerve también habló, lo hizo en representación de los procesados por el 30S. “Este evento es histórico, porque se inaugura esta mesa de la verdad y la justicia para que perseguidos políticos no existan en el Ecuador”.