El martes 20 de octubre del 2020, Quito Juventudes escuchó a Alfredo Borrero (segundo sentado), de Creo. Foto: cortesía Quito Juventudes
A sus 16 años, Sebastián Tobar tiene desconfianza en los políticos del país. El joven asiste a clases virtuales en el Colegio Andino y no tiene planificado sufragar en las elecciones generales del 2021. Considera que los candidatos no cumplen sus ofrecimientos.
Ariel Herrera, actualmente de 17, en cambio, ejercerá por primera vez su derecho al voto el 7 de febrero del próximo año. El joven siente interés por la política y desde ya analiza las propuestas de los postulantes. Cuenta que junto a otros compañeros del Gutenberg Schule sí platican sobre el futuro del Ecuador y lo que está en juego en los próximos comicios.
Sebastián y Ariel forman parte de los 633 044 jóvenes de entre 16 y 17 años que integran el padrón electoral, pero que su voto es facultativo. Este grupo representa el 4,8% del total de los sufragantes.
Si se compara la cantidad de adolescentes con voto opcional, el número es equivalente a los electores de Azuay.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) tratará de incentivar la participación de los jóvenes con voto facultativo, en medio de la pandemia del covid-19. El reto del organismo será reducir el porcentaje de ausentismo de este segmento, que en las elecciones seccionales del 2019 alcanzó el 35,6%.
El mayor porcentaje de participación en los últimos siete procesos electorales se alcanzó en la segunda vuelta de los comicios generales del 2017, en los que ganó el actual mandatario, Lenín Moreno.
Uno de los factores que podría incidir, según los consejeros Enrique Pita y Luis Verdesoto, es la garantía que ofrezca el CNE, en relación a las medidas de bioseguridad. El jueves 22 de octubre del 2020, la presidenta del ente, Diana Atamaint, se reunió con autoridades del Ecu-911 para implementar la herramienta Distancia2, que mide el distanciamiento social.
Además, ofreció contratar personal para hacer cumplir los protocolos al interior de los recintos electorales.
A pesar de que la campaña se iniciará el 31 de diciembre, los candidatos ya realizan recorridos para acercarse al electorado. Incluso, se han ventilado algunos ofrecimientos orientados a los adolescentes, como revisar el examen de acceso a las universidades públicas.
Alisson Gallardo, de 17 años, estudia en el colegio fiscal Santiago de Guayaquil. En enero del 2020 cumplirá la mayoría de edad y sí prevé sufragar en las elecciones. Sin embargo, aún está indecisa. Sus familiares cercanos tampoco han definido por quién votar, pero están seguros de algo: la economía del país está en crisis.
El investigador y politólogo César Ulloa explica que este segmento de voto facultativo toma decisiones con una marcada influencia de su familia y su contexto más cercano. Por ello, considera que es un error de los candidatos apuntar en su estrategia directamente a los adolescentes, con ofertas que pueden terminar siendo demagógicas. “Lo que a ellos les interesa es que la situación de sus padres mejore, que tengan un trabajo estable. Lo que debe mirar un candidato es quiénes están sosteniendo a esa familia”, comentó.
Josefeth Avilés, de 16 años, estudia en el colegio municipal Quitumbe, en el sur de Quito. A pesar de que aún no decide a quién apoyar, cree que con su voto sí puede contribuir a la construcción de un mejor país.
Algunas organizaciones políticas, como la Izquierda Democrática, han realizado encuentros con jóvenes para incentivar el sufragio responsable.
Verónica Carrillo, integrante de las Juventudes del partido naranja y candidata a asambleísta alterna, apuntó que la intención es fomentar el pensamiento crítico para que los chicos razonen su decisión.
También organizaciones sociales buscan ese cometido. La activista política Ruth Chamba contó que desde septiembre pasado se conformó el colectivo Quito Juventudes, un espacio de diálogo y debate para promover el voto consciente entre los adolescentes del sur de la capital.
Chamba reconoce que muchos de sus amigos “no quieren saber nada de la política” pero la idea es que reflexionen sobre la importancia del proceso electoral, ya que el país afronta varias crisis: económica, social y política.
En Quito Juventudes ya han presentado sus propuestas algunos candidatos.
El martes último, por ejemplo, efectuaron un conversatorio con Alfredo Borrero, vicepresidenciable de la alianza Creo-Partido Social Cristiano.
El colectivo organiza un debate con los candidatos a asambleístas por el distrito sur, de Pichincha, para que los jóvenes conozcan sus planes.
En contexto
El 18 de agosto pasado, el Consejo Nacional Electoral (CNE) cerró el padrón que se utilizará en las elecciones generales del 7 de febrero del 2021. Dentro de los planes del ente se contempla la realización de campañas informativas sobre el proceso comicial.