Una madre de familia busca opciones de juegos de mesa en un establecimiento comercial al sur de Quito. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
Las tiendas de juguetes, que han tenido una caída en sus ventas a consecuencia de la pandemia de covid-19, buscan recuperarse en Navidad, la mejor temporada para este segmento del área comercial.
Entre enero y septiembre de este año, la importación de juguetes se redujo en un 52% en relación con el mismo período del 2019, según datos de la Cámara de Comercio de Quito, con cifras del Banco Central del Ecuador.
La venta de juguetes que se elaboran localmente también ha caído, según los productores nacionales.
Para impulsar la comercialización de juguetes, estos establecimientos han implementado estrategias más potentes en relación con los años anteriores.
Entre estas se encuentran descuentos de hasta el 50%, facilidades de pago que incluyen más de seis meses de gracia, cancelar los consumos a 12 meses sin intereses, separar la mercadería con abonos y otras promociones.
En la oferta se incluyen los productos que tiene más acogida entre los niños. Se encuentran, por ejemplo, los muñecos Ksimeritos, las muñecas Lol Surprise, los Cry Babies, juegos de cocina, figuras de acción, pistas de autos, drones, robots, juegos de mesa, manualidades y rompecabezas.
Por la pandemia, estos tres últimos productos se han convertido en una de las principales opciones de recreación familiar, porque los padres tratan de no exponer a sus hijos en los parques u otros espacios, refirieron las tiendas locales consultadas.
Con estas iniciativas, se busca que la demanda de estos productos despunte, expresó la importadora Estuardo Sánchez, que tiene 15 locales a escala nacional.
Por la pandemia, en estos establecimientos comerciales, por ejemplo, se ha reducido en alrededor del 25% la afluencia de visitantes.
En años anteriores, en estas fechas, ya empezaban las compras por parte de los padres de familia para los obsequios tradicionales por la Navidad, tanto familiares como institucionales. Sin embargo, este año el consumo en los hogares cayó por la crisis económica agravada por la pandemia.
Además, han influido las restricciones para operar con el aforo normal en los centros comerciales y locales, por el posible riesgo de contagios de coronavirus.
En la cadena Juguetón, como efecto de la pandemia, se ha evidenciado también en estos meses una menor afluencia de clientes a los locales, respecto del año pasado.
Por esto, esta firma decidió brindar a sus clientes la opción de reservar la mercadería con un abono inicial. La diferencia se podrá pagar “poco a poco” hasta el 15 de diciembre próximo.
Mientras tanto, para los pagos con tarjeta de crédito que se hagan hasta el 30 de noviembre se ofrece la alternativa de diferir los consumos a 3, 6, 9 y 12 meses sin intereses y con más de seis meses de gracias.
Estuardo Sánchez, en cambio, incorporó este año la opción de acceder a un crédito directo con el que se podrá diferir el pago hasta 12 meses. Además, admiten pagos con cualquier tarjeta de crédito diferido hasta 12 meses sin intereses.
Para acceder a estos beneficios, Alexander Rodríguez acudirá durante el fin de semana a la juguetería para elegir los regalos para sus hijos.
Pero esta vez no les llevará a los menores, de 8 y 3 años, a la juguetería para no exponerlos. “Antes iba con ellos para comprarles lo que ellos querían”.
Las compras en línea o los pedidos a domicilio son otras de las estrategias en las que se apoyan las tiendas de juguetes.
En Kindersariato, que diseña kits lúdicos, ha recurrido a sus redes sociales para ofertar sus productos que tienen por objetivo fomentar el aprendizaje a través del juego. Esto le ha permitido recuperar ventas de manera progresiva, aunque no se ha llegado aún a los niveles prepandemia.
Amalgamatoys, que elabora juguetes con madera reciclada con mensajes alusivos a la conservación, ha hecho alianzas para exponer sus productos en tiendas en línea.
En estos espacios, Sandra Torres ha seleccionado los juguetes para sus sobrinas de 10 y 8 años. Ella prefiere optar por esta modalidad para evitar exponerse a posibles aglomeraciones en las tiendas.
En contexto
El sector privado prevé ventas totales por USD 10 870 millones durante el mes de diciembre próximo. La cifra es menor a la que se alcanzó el año pasado en ese mismo mes, que fue de USD 12 146 millones. Una razón es la baja del consumo de los hogares.