En el orden del día del Pleno de la Asamblea Nacional se incluyó el análisis del contenido de un audio de Eduardo Mangas, secretario general de la Presidencia, que fue filtrado en redes sociales. Foto: Flickr Asamblea Nacional
Con una mayoría inédita, conformada por asambleístas correístas de Alianza País (AP) y legisladores Creo, SUMA, Partido Social Cristiano, Izquierda Democrática, Sociedad Patriótica… este martes 5 de diciembre del 2017 se incluyó en el orden del día del Pleno de la Asamblea Nacional el análisis del contenido de un audio de Eduardo Mangas, secretario general de la Presidencia, filtrado en redes sociales.
Ahí se escucha la voz de Mangas en temas como el diálogo que impulsa el Gobierno, la campaña electoral del 2017, la corrupción, entre otros.
El proponente del cambio del orden del día en el Pleno fue Homero Castanier, del movimiento Creo, y tuvo el respaldo de 72 votos, entre ellos de legisladores de AP como Gabriela Rivadeneira, Marcela Aguiñaga, Soledad Buendía, Verónica Arias, Marcela Holguín, Lira Villalba, Mauricio Proaño, Hermuy Calle y Juan Cristóbal Lloret, entre otros.
Castanier planteó que Mangas compareciera ante la Asamblea Nacional, para que aclare sus declaraciones sobre la situación política del país. En el Pleno del Legislativo, si la sesión no es suspendida este 5 de diciembre del 2017, se deberá decidir si se acoge ese pedido.
Mangas asegura que las grabaciones “han sido sacadas de contexto y no corresponden a la posición del Presidente de la República”. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO
Horas antes, la Secretaría Nacional de Comunicación (Secom) difundió la versión del Secretario de la Presidencia. Se señaló que las declaraciones del audio fueron sacadas de contexto y “no corresponden a la posición del presidente de la República, Lenín Moreno”.
De igual forma, Mangas rechazó la grabación ilegal y “manipulación” como forma de hacer política. Mangas no ha dado detalles sobre el contexto en que se dieron las declaraciones. La difusión del audio coincide con un momento político en el que actores sociales como el movimiento indígena demandan al Régimen resultados sobre el diálogo nacional.
La mayoría en la Asamblea, para dar paso a la inclusión del tema en el orden del día, se logró con votos de la oposición y parte del oficialismo.