La Comisión de Tránsito del Guayas ha mantenido desde 1948 el control del tránsito en Guayaquil. Foto: Archivo
Nació en respuesta a una creciente necesidad de la ciudad y la provincia. El 29 de enero de 1948 el entonces presidente Carlos Julio Arosemena Tola creó la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG). Fue mediante Decreto Ley de Emergencia 140, publicado en el Registro Oficial 112 del 30 de Enero de 1948.
La flamante institución sería la encargada de cuidar y ordenar el tránsito vehicular en la ciudad y la provincia.
La idea surgió en 1947. Frente a la situación del tránsito en esa época, Guillermo Arosemena le recomendó a su tío, suegro y Primer Mandatario la creación de un cuerpo de vigilantes de tránsito, independiente y autónomo.
Planteaba que constase de 120 miembros, además de los jefes y empleados de oficina. También soñaba con que esta División de Tránsito, como él la llamó, operase tanto en Guayaquil como en Quito.
Tras la quiebra de la Empresa de Carros Urbanos y la liquidación de la Empresa de Tranvías Eléctricos hacia 1940 creció el parque automotor de buses y en 1950 ya había 145 unidades recorriendo las calles de la ciudad.
En 1947 aparecieron los colectivos; la primera versión fueron los Station Wagon en que iban seis personas sentadas y el pasaje costaba un sucre. Como la demanda aumentó se adaptaron carrocerías para convertirlos en vehículos tipo micro bus para 16 personas.
En la década de los años cincuenta los colectivos aumentaron en el 179% con relación a los buses (78%); y en los 60, el primero aumentó en 528% y los buses disminuyeron en el 3%.
La Comisión de Tránsito del Guayas inició sus labores con un cuerpo de 12 oficiales y 90 vigilantes. Su escuela de formación y sede comenzó en la manzana de las calles Chile, Brasil, Cuenca y Chimborazo que es donde se ubican sus actuales dependencias administrativas.
Tres meses después la CTG hizo el primer llamado a los ciudadanos que desearen formar parte de sus filas como vigilantes. Medio millar de hombre acudieron.
Con el pasar de los años la Comisión de Tránsito del Guayas fue la primera entidad que puso en servicio policial a la mujer ecuatoriana en las calles de Guayaquil. De un grupo de 400 mujeres aspirantes, solo 12 lograron aprobar el curso y graduarse de vigilantes en el año 1971.
Por muchos años la CTG fue administrada por representantes de reconocidas instituciones y autoridades provinciales bajo un modelo de servicio cívico y comunitario.
En 1962 el Congreso Nacional pretendió absorber y descentralizar a la CTG. La Cámara de Diputados lo había resuelto en primera discusión. La reacción inmediata de los guayaquileños, reunidos en la Plaza San Francisco el 20 de septiembre de dicho año, logró que se reconsidere tal resolución.
Pero así como la institución logró un protagonismo y representatividad en la ciudad y la provincia, así mismo también a lo largo de su historia se vio envuelta en casos polémicos y de corrupción.
Como en 1986 cuando se denunció el remate de autos de lujo, que ingresaron ilegalmente al Ecuador, como si se tratara de chatarra; el fraude en la matriculación de vehículos detectado por la Contraloría en 1987; la adquisición de 71 buses articulados sin los respectivos repuestos en 1988; el sobreprecio de 1 300 millones de sucres detectado por Contraloría en la adquisición de repuestos y la contratación de servicio de mantenimiento; el cobro de coimas a las cooperativas de transporte en una garita de la Terminal Terrestre; la matriculación de 588 vehículos con documentos falsos en el 2001…
El 22 de mayo de 1999, tras el ejecútese a la Ley Sustitutiva de la Ley de la CTG por el presidente Jamil Mahuad, la entidad recobró su autonomía administrativa y logró su descentralización financiera 51 años después de su fundación. Además dejó fuera del directorio a los delegados de los transportistas.
A lo largo de gran parte de su historia, el directorio de la CTG estuvo integrado por delegados del Consejo Provincial del Guayas, del Presidente de la República, del Municipio de Guayaquil, la Junta Cívica y las Cámaras de la Producción.
En el 2007 el Gobierno, a través del entonces Tribunal Constitucional, logró suprimir dos de los tres cupos de representación que tenía el Cabildo porteño en el directorio de la CTG a través de la Junta y las Cámaras.
Y fue hasta el 17 de marzo del 2011, en que la Asamblea Nacional acogió las objeciones del Ejecutivo a la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, con las cuales desapareció, luego de 63 años de historia, la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG).
En su reemplazo creó la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), con ámbito nacional, cambiando la forma de su integración. Desde entonces la entidad es presidida por el delegado del Ministerio de Transporte y dirigida por el delegado del Presidente de la República. El directorio lo completan los delegados del Ministerio del Interior y dos representantes de la Asociación de Municipalidades del Ecuador.
Actualmente la CTE, con un cuerpo uniformado de 4 000 agentes, tiene presencia en 1 863 kilómetros de control de carreteras de Guayas, Los Ríos, El Oro, Santa Elena y Azuay. Y en agosto entrará a Santo Domingo de los Tsáchilas.
Del mismo modo, y con la entrega de las dos primeras competencias (matriculación y revisión) al Cabildo, la CTE comenzó a preparar su salida de Guayaquil que estaría del todo concretada en agosto del 2015 cuando está previsto que el Municipio de Guayaquil ponga en las calles a los nuevos Agentes Civiles de Tránsito, que remplazarán a los tradicionales vigilantes.