Comisión de Gobiernos Autónomos se allanó al veto parcial de la Ley de Ordenamiento Territorial

Richard Calderón, presidente de la Comisión, aseguró que aceptaron las objeciones del Presidente porque se mantiene el sentido de la Ley que es la seguridad para las personas. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Richard Calderón, presidente de la Comisión, aseguró que aceptaron las objeciones del Presidente porque se mantiene el sentido de la Ley que es la seguridad para las personas. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Richard Calderón, presidente de la Comisión, aseguró que aceptaron las objeciones del Presidente porque se mantiene el sentido de la Ley que es la seguridad para las personas. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Con siete votos a favor, la Comisión de Gobiernos autónomos aceptó las 10 objeciones que el presidente Rafael Correa hizo sobre el proyecto de Ley de Ordenamiento Territorial, Uso y Gestión del Suelo. Ahora, dependerá del pleno del legislativo que se ratifique esta decisión y la norma sea enviada al Registro Oficial.

Correa observó ocho artículos, una disposición transitoria y una reformatoria del cuerpo legal. Richard Calderón, presidente de la Comisión, aseguró que esa decisión se tomó puesto que las objeciones son de forma y se mantiene el sentido de la Ley que es la seguridad para las personas.

Las objeciones consideraban que en varios artículos se establecen detalles que no deberían estar en la ley, sino en un reglamento expedido por el Consejo Técnico de Uso y Gestión de Suelo para que estos puedan ajustarse a las diferentes realidades locales del país sin necesidad de una reforma legal.

Por ejemplo en los pasos y requerimientos para la formulación o actualización de los planes de desarrollo y ordenamiento territorial de los gobiernos autónomos descentralizados (GAD). El mismo criterio se utilizó en el veto a los artículos 27, 28 y 29 sobre la regulación del uso y gestión del suelo.

Ahora, las objeciones deberán ser debatidas en el pleno de la asamblea con base en el informe de allanamiento que presentará la Comisión y los legisladores deberán votar a favor o en contra. Si es favorable, el proyecto será enviado de vuelta al Presidente para que obtenga el ejecútese y posteriormente entre en vigencia con su publicación.

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