Los comerciantes de las terminales terrestres de Quitumbe y Carcelén realizaron una protesta, ante la notificación para que desalojen los locales que ocupan en ambas estaciones de buses interprovinciales de Quito. Foto: Yadira Trujillo/ EL COMERCIO
“No nos mueven y no nos moverán de las terminales Quitumbe y Carcelén”. Esa frase se escuchó la mañana de este sábado 13 de julio del 2019, en la estación terrestre de Quitumbe, en el sur de Quito. Eran las voces de los comerciantes de este sitio y la de Carcelén, quienes realizan una concentración pacífica.
La movilización la hicieron por la notificación recibida el jueves 11 de julio, en la que les informaron que sus contratos no serán renovados y deberán desalojar 165 locales de ambas terminales hasta el martes 16 de julio.
“Somos comerciantes de más de 60 años, que venimos desde Cumandá”, recordó José Morales. Aseguró que en el gremio ya se habla de un proceso de licitación de los espacios, del cual “los comerciantes que actualmente tienen sus negocios quedarían fuera”.
El Municipio de Quito anunció el inicio de un plan de transformación de las dos terminales “para garantizar la seguridad y el orden” y que las estaciones sean sitios cómodos seguros y limpios.
La Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop) anunció que la modernización de las terminales arrancará con obra civil y que, paralelamente, se mantendrán mesas de trabajo con comerciantes para fortalecer el proceso de transformación.
Ernesto Miño, coordinador de las asociaciones de comerciantes de Quitumbe y Carcelén, dijo que el gremio se encuentra abierto a participar de la transformación. Pidieron que se realice por períodos definidos para diferentes áreas y que se firme un documento que garantice su permanencia en los negocios que -asegura- son el sustento de sus familias.
Los comerciantes sostuvieron que enviaron un oficio a la Alcaldía. Aseguraron que ayer viernes 12 de julio del 2019, fueron hasta el Municipio donde les recibió una asesora del alcalde Jorge Yunda, quien ofreció realizar una mesa de trabajo el próximo martes.
Pero antes de la gestión, este mismo lunes, los comerciantes irán al Municipio con todos sus perritos, que aseguraron se quedarán sin comer en caso de que ellos pierdan sus negocios. Lo harán como una forma de sensibilizar al Alcalde, quien ha demostrado su interés por los canes.
Los locales de las terminales (Quitumbe y Carcelén), aseguraron representantes de las diferentes asociaciones, seguirán abiertos y funcionando normalmente. Solo esperan que no se tomen acciones de desalojo con intervención de la fuerza pública.
A los comerciantes les preocupa la premura con la que les informaron que sus contratos no serán renovados. Aseguraron que previamente les ofrecieron lo contrario y que ellos pidieron la renovación hace 90 días, cumpliendo el contrato, que se acaba el 16 de julio.
El patio de comidas, bazares, cabinas telefónicas, confiterías, productos de belleza, farmacia, servicio al transportista y artesanías se encuentran en los locales de estas terminales terrestres. En el patio de comidas, por ejemplo, los usuarios manifestaron su preocupación.
Aseguraron que de cerrarse todos los locales se reducirá las facilidades que tienen para comer en la terminal antes o después de un viaje. También les preocupa que los comerciantes no tengan un sustento económico.