Ingredientes
1 cochinillo
manteca de cerdo blanca
4 dientes de ajo
1 vaso de vino blanco
hojas de laurel
sal al gusto
Preparación
Machacar los ajos y mezclarlos con la manteca de cerdo y el laurel. Salar el cochinillo. Con esta mezcla, embadurnar bien el cochinillo por fuera y por dentro. Pinchar con un tenedor la piel del cochinillo para que no salgan burbujas de aire posteriormente.
Colocar a la rejilla a la bandeja del horno; echar agua y el vaso de vino en el fondo de la bandeja. Poner el cochinillo sobre la rejilla, con la piel hacia abajo.
Hornear el lechón a 180 grados durante una hora o una hora y media. Una vez pasado este tiempo, dar la vuelta al cochinillo y ponerlo con la piel hacia arriba por media hora más, para que esta quede crujiente. Si durante a cocción se quedase la bandeja sin agua, se puede echar más.
Esta receta segoviana trata de rescatar el sabor propio de la carne del lechón, utilizando ingredientes como el ajo, el aceite de oliva. El secreto está en la cocción, para que la superficie quede crocante mientras que al interior la carne esté muy suave.