Procedente de Asia Menor y Europa, el clavel con su aspecto dentado, es considerado entre flores más populares. Según especie, la altura varía entre 25 y 70 cm. Las flores de dulce aroma poseen su atractivo como borduras, manchas amplias en jardines y macetas. Para tener una floración abundante, es recomendable espaciarlos entre 15 y 30 cm y retirar las flores secas con frecuencia.
Aunque el clavel es de pleno sol, soporta las heladas. Crece fácilmente en suelos ordinarios y bien drenados. El riego es constante pero moderado. Durante el verano es necesario aplicar semanalmente un abono con el riego. La multiplicación es por esquejes o semillas.