China reprime fuerte a los uigures

Pekín. ANSA

La Policía china disparó ayer gases lacrimógenos para reprimir a manifestantes que realizaban nuevas protestas en el centro de Urumqi, capital de la región de Xinjiang, en el noroeste de China, donde fue impuesto el toque de queda. La represión se dio tras los episodios de violencia étnica del domingo pasado, en los cuales murieron al menos 156 personas.

La agencia Nueva China reportó la imposición del toque de queda en Urumqi, según declaraciones del secretario regional del Partido Comunista Chino, Wang Lequan.

Grupos que gritaban “ataquemos a los uigures”, provistos de bastones metálicos, aseguraron que los integrantes de esa etnia se comportaron como ‘animales feroces’ e intentaron forzar los   bloqueos  de las fuerzas de seguridad chinas.

La manifestación fue dispersada por la Policía. Antes se había producido una protesta de grupos uigur, con participación mayoritaria de mujeres, también con disturbios, para reclamar la liberación de detenidos.

La misma agencia dijo que son al menos 1 434 las personas arrestadas tras los episodios de violencia, y que comenzaron a ser interrogadas por las fuerzas de seguridad.

El Gobierno chino acusó a la dirigente uigur en el exilio, Rebiya Kadeer, de organizar las protestas con el fin de promover el separatismo, para la escisión de la región de Sinkiang.

Kadeer sostuvo en un comunicado difundido en la Internet que “nunca pidió a nadie, en ningún momento” realizar manifestaciones en las calles.

El primer episodio al que se refirió la agencia ocurrió el 26 de junio, cuando operarios chinos atacaron a operarios de etnia uigur originarios de Xinjiang, matando al menos a dos ellos en Shaoguán. Los uigures que protestaron el domingo en Urumqi reclamaban una pesquisa de lo sucedido en Shaoguán y el castigo de los culpables.

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