El canciller chileno, Heraldo Muñoz, interpretó la invitación de Francisco al diálogo como “una afirmación de que la aspiración marítima boliviana es un asunto bilateral”. Foto: Sebastián Silva/ EFE.
Chile valoró el 9 de julio del 2015 el llamamiento del papa Francisco a un diálogo con Bolivia sobre el diferendo marítimo entre los dos países, y consideró que no supuso un respaldo a La Paz.
“Nos parece muy positivo”, dijo el canciller chileno, Heraldo Muñoz, quien interpretó la invitación de Francisco al diálogo como “una afirmación de que la aspiración marítima boliviana es un asunto bilateral”.
“Las referencias que hizo el Papa ayer son de gran interés. El papa no ha hablado de soberanía, no ha tomado partido ni ha mencionado el juicio en La Haya y, por el contrario, ha hecho un llamado al diálogo, en contraste a las primeras palabras de (el presidente) Evo Morales al recibir al papa, que han sido, como estamos acostumbrados, agresivas”, afirmó Muñoz.
El canciller chileno se refería así a las declaraciones del pontífice, que llamó el miércoles en un acto en la Catedral Metropolitana de La Paz, a buscar soluciones compartidas sobre la demanda de La Paz de un acceso soberano al mar, enclave que perdió a manos de Chile en una guerra en 1879.
“Todos los temas, por más espinosos que sean, tienen soluciones compartidas. Tienen soluciones razonables, equitativas y duraderas (.) “Estoy pensando en el mar: diálogo es indispensable. Construir puentes en vez de levantar muros”, emplazó entonces Francisco.
El canciller chileno consideró que el mensaje papal supone una advertencia al gobierno boliviano “para que cese la hostilidad, la agresividad, para que retome el diálogo y respete a Chile y sus autoridades” y para que las dos naciones se entiendan “en un clima distinto al que ha prevalecido por parte de Bolivia tras la demanda en La Haya”, añadió.
Bolivia inició en abril de 2013 un juicio contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para que el tribunal obligue a Santiago a negociar una salida soberana al mar. Sin embargo, el gobierno chileno considera que la Corte no tiene jurisdicción para abordar el reclamo de La Paz, pues argumenta que sigue vigente un tratado suscrito en 1904 por ambos países que estableció claramente los límites fronterizos, por lo que pide que el organismo se inhabilite en este caso.
Chile y Bolivia esperan que para fines de este año la CIJ dé a conocer la resolución sobre su competencia o no para seguir conociendo el caso, después de la fase de alegatos orales que se realizaron en mayo pasado.