Mañana, sábado 28 de febrero del 2014, según el cronograma de la Agencia Metropolitana de Tránsito, concluirá el mes de plazo para la revisión mecánica de los vehículos con placas terminadas en el número 1. Foto: Alfredo Lagla/ EL COMERCIO.
Nelson Sandoval se hundía en el asiento de su Chevrolet negro del 2012, como si intentara abrigarse. A las 23:30 de este jueves 26 de febrero del 2015 el frío era intenso en Quito, pero para él valía la pena; era el primero de la fila para ingresar, a las 08:00 de este viernes, al Centro de Revisión Vehicular de Guajaló, en el sur de la ciudad.
Sin embargo, a las 07:40 de hoy, viernes 27 de febrero del 2015, luego de pasar la noche guardando turno frente al Centro de Revisión, Sandoval fue desplazado al segundo puesto de la fila.
El conductor de un vehículo con placas del Estado llegó a esa hora, con el primer turno, que había recibido la tarde anterior. Sandoval entendió que se trataba de una asignación previa y aceptó.
Mañana, sábado 28 de febrero, según el cronograma de la Agencia Metropolitana de Tránsito, concluirá el mes de plazo para la revisión mecánica de los vehículos con placas terminadas en el número 1. Sin pasar por ese filtro, los automotores no pueden ser matriculados en el Distrito.
Por esa causa, decenas de conductores llegaron a guardar puesto en la víspera. A las 24:00, este Diario contabilizó 87 vehículos en la fila, que se extendía desde el centro de revisión de Guajaló hasta la avenida Maldonado.
Anoche, en el segundo lugar de la fila se encontraba el ibarreño Andrés Vallejo, vecino de Miraflores. Para conseguir ese puesto llegó a las 16:00. Él no sabía por qué había tantos vehículos en la cola. Entre los conductores había quienes comentaban que entre los primeros puestos había personas que se dedican a vender turnos.
Esta mañana la hilera de carros se extendía hacia el sur por la Maldonado. A las 09:00 la fila era larga, con 350 automotores. En la parte posterior del centro de revisión, una mujer pedía USD 10 para ayudar a los conductores a ‘ingresar rápido’. Lo único que solicitaba era el comprobante de pago de la revisión vehicular.
Asimismo, los comerciantes ambulantes con comida, accesorios para vehículos y atención mecánica tenían alta demanda. Lo que más se vendió fue café, sánduches y secos de pollo. Incluso, en ciertos lugares se alquilaban llantas nuevas por USD 5, para que los autos pudieran pasar la revisión.
Carlos Tufiño, docente de colegio, también se desveló. Llegó a las 19:00. Estuvo hasta la medianoche acompañado por su esposa Verónica Chauca, quien llegó con comida y una cobija a las 22:00, después de dejar a sus hijos dormidos en casa. “No pudimos matricular antes el carro porque mi esposo pasó enfermo, por eso dejamos para el final del mes”, decía Chauca.
Santiago Oyos, en cambio, había acudido al Centro de Revisión a las 05:00 del jueves, pero vio que la columna de carros iba hasta el barrio El Conde, así que dio la vuelta y se dirigió al trabajo. Por ello, optó por volver en la noche, a dormir en la fila, para lograr un buen puesto: el 32.
Ricardo Criollo, guardia de seguridad, estaba apenado. Debió pedir permiso con cargo a vacaciones en la empresa para la cual trabaja. “Esto es una dificultad cada año, debemos faltar a pesar de que venimos los primeros días del año”, decía.
Desde las 08:00 de hoy viernes, los automotores ingresaron por turnos al estacionamiento del Centro. Los choferes entregaron en una ventanilla la llave del vehículo, la matrícula y el comprobante del pago. En una sala de espera dividida por un vidrio, similar al de las maternidades, ellos miraban cómo los técnicos hacían los chequeos de gases, frenos, llantas, entre otros, en cada auto. Los vehículos que no se ajustan a las medidas establecidas en ese control, no pueden ser matriculados y deberán volver –luego de corregir las fallas detectadas- a la revisión.
Este viernes 27 de febrero el Centro de Control de Guajaló atenderá hasta las 20:00; mañana abrirá sus puertas de 08:00 a 12:00.