El cementerio José María Azael Franco estará abierto al público de 08:00 a 17:00 de lunes a viernes y feriados de 07:00 a 18:00. Foto: cortesía del Municipio de Tulcán.
El cementerio municipal José María Azael Franco, de Tulcán, en la provincia de Carchi, reabrió sus puertas al público este 20 de octubre de 2020. Así lo autorizó el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal para evitar aglomeraciones ante la cercanía por el Día de los Difuntos.
Las visitas a este camposanto del norte de Ecuador, famoso por las 309 esculturas en ciprés, estaban restringidas desde el 16 de marzo pasado por la pandemia del covid-19.
Según Alexis Argoti, jefe de Turismo del Municipio de Tulcán, con el cambio de semáforo epidemiológico de rojo a amarillo, el 8 de junio pasado, se permitía el ingreso de albañiles, jardineros y artesanos que elaboran lápidas y que dependen del funcionamiento del panteón. También estaba permitida la entrada de ciudadanos que necesitaban hacer trámites en la administración.
Pero, desde este martes 20 de octubre, están abiertas las puertas a todos los visitantes.
Para el ingreso las personas deben registrarse en la puerta principal del cementerio y cumplir con medidas de bioseguridad, como el uso obligatorio de mascarilla, desinfección manos y calzado y la toma de la temperatura corporal.
En el camposanto, declarado patrimonio cultural del Ecuador en 1984, hay 309 esculturas en ciprés. Foto: EL COMERCIO
Para quienes acudan a los espacios de sepultura la permanencia no podrá ser mayor de 20 minutos y en los espacios de áreas verdes de 30 minutos.
Antes de la pandemia, el cementerio declarado patrimonio cultural del Ecuador en 1984, a recibía en temporada alta 2 000 visitas diarias. En agosto y septiembre había más turistas nacionales y diciembre y enero más visitantes colombianos.
La mayoría llegan atraídas por las esculturas verdes, cuyo mantenimiento están a cargo de 12 jardineros. En el primer jardín hay figuras precolombinas y en el segundo jardín esculturas inspiradas en la fauna ecuatoriana.
Ante la pandemia, en el cementerio se adecuó un área para el sepelio de personas fallecido por covid-19. Hasta el momento hay 90 cuerpos sepultados.
El cabildo también autorizó el desarrollo de la Ferias del pan y de las flores, entre el 31 de octubre y el 3 de noviembre próximo. La primera se efectuará en el parque Ayora y la otra el bulevar del camposanto.