Personal de la Policía Nacional y Metropolitana se ubicó en la zona en donde se produjo la deflagración. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
La deflagración ocasionada por acumulación de gas licuado de petróleo, que ocurrió en el sector de La Kennedy, en el norte de la urbe, dejó 60 viviendas afectadas en sus ventanales y mampostería. Pero se hizo la evaluación de 101 casas ubicadas a tres cuadras a la redonda. Así lo indicó Alejandro Terán, director de Riesgos del Municipio de Quito. Además, aseguró que los trabajos en esta zona ya finalizaron.
Precisamente, alrededor de las 09:00 de este viernes 12 de febrero del 2016, los propietarios de locales comerciales de la calle De Los Pinos empezaron con los arreglos de sus negocios, que fueron afectados por este evento, ayer.
Pablo Baquero, propietario de un taller de mecánica, explicó que su negocio presentó pérdidas que alcanzan los USD 200 000 aproximadamente, ya que se trata de equipos de mecánica, la infraestructura de la casa, los daños en los 10 carros y motos que estaban en el local. “Tratamos de arreglar el local para hacer una evaluación total de las pérdidas. Simplemente tenemos que salir adelante”.
Un taller de mecánica fue uno de los locales afectados por la deflagración en el sector de La Kennedy. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Otro de los propietarios que llegó al lugar fue Wilson Castillo, quien es dueño del inmueble ubicado frente a la tienda donde se habría originado la deflagración. El hombre, también, llevó a trabajadores para que hagan las evaluaciones en su propiedad, en la que habitan cerca de 20 personas entre departamentos y locales comerciales. En la zona, además, se observó la presencia de personal de la Policía Nacional y Metropolitanos.
La noche del jueves 11 de febrero, numerosas personas concurrieron al sitio de la deflagración para mirar lo ocurrido en esta parte de Quito. En vehículos o a pie, las personas observaban las paredes y ventanales afectados. A Pablo Martínez, vecino de El Edén, le llamó la atención los daños causados en la vivienda donde se acumuló el gas.