Se ubica en la calle García Moreno, en pleno casco colonial de Quito, y pertenece desde el siglo XIX a la iglesia de El Sagrario, con la cual colinda. La casa en la cual vivió Manuela Cañizares es uno de los sitios históricos que tienen relación con el Primer Grito de la Independencia, cuyo Bicentenario se celebra en este año.
La heroína quiteña arrendaba una habitación en el inmueble. En la noche del 9 de Agosto de 1809, los próceres quiteños se reunieron en la casa en la cual vivía Manuela Cañizares para preparar el golpe revolucionario fijado para el 10 de Agosto.
En el lugar tuvo lugar un episodio reseñado por historiadores. Manuela Cañizares, indignada, toma su puñal en la mano y se para en la puerta de su casa, para evitar que los comprometidos desistan del empeño independentista. Y luego les gritó con voz firme: “¡Cobardes! ¡Hombres nacidos para la servidumbre! ¿De qué tenéis miedo? ¡No hay que perder tiempo!”.
La ahora casa parroquial El Sagrario es un tesoro patrimonial. Allí funcionó la primera escuela de Quito y conserva documentos. En pesados libros reposan las primeras partidas de bautismo de la ciudad: de 1587.
Allí está la fe de bautismo de Mariana de Jesús, hija de Jerónimo de Paredes y doña Mariana de Jaramillo, del 22 de noviembre de 1618. En 1950, el Vaticano canonizó a Mariana de Jesús. La habitación de Manuela abre las tardes de los miércoles.