La ‘casa del árbol’, lugar desde donde se monitorea al volcán Tungurahua. Foto: EL COMERCIO
La famosa Casa del Árbol en la comunidad Ventanas Runtún, frente al volcán Tungurahua, fue remodelada. En ese lugar vive Carlos Sánchez, uno de los vigías del coloso, ubicado en la provincia de Tungurahua, en la Sierra centro andina de Ecuador.
A pocos de metros de la infraestructura funciona una estación de monitoreo de sismos del coloso, que se encuentra activo desde octubre de 1999.
Los turistas arriban a este lugar del cantón Baños de Agua Santa para observar la emisión de ceniza y la salida de material incandescente cuando se encuentra en proceso eruptivo.
La Casa del Árbol fue edificada con paredes de madera, techo de zinc y un columpio que cuelga de una de las ramas del árbol.
El propietario Carlos Sánchez explicó que la actual infraestructura está asentada sobre cemento y hierro. Además, se instaló un columpio adicional al que había anteriormente.
“Se tuvo que acatar las órdenes del Ministro de Turismo. La madera que se colocó está curada y durará varios años. Los columpios cuentan con poleas, rulimanes y cuerdas resistentes para que los visitantes puedan mecerse con seguridad sobre un precipicio de más de 2 000 metros sobre el nivel del mar”, dijo Sánchez.
La construcción de la moderna estructura tuvo el asesoramiento de la dirección provincial del Ministerio de Turismo de Tungurahua.
Según Wilian Pico, director provincial, la construcción elimina el peso del arbusto. Además, se está recubriendo el metal con texturas similares al del árbol. “El impacto visual va a ser menor porque todo es con plantas naturales. Los dos columpios que están funcionado son el principal atractivo”, comentó Pico.
Actualmente se finaliza la construcción de una cafetería y la caseta de guardianía.
Baños de Agua Santa es conocida por sus atractivos turísticos como cascadas, aguas termales y paisajes naturales. En estos parajes se puede practicar los deportes de aventura como el canopy, canotaje, bungee jumping, canyoning, entre otros.