La presidenta de la organización argentina Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto. Foto: Archivo
La presidenta de la asociación argentina de derechos humanos Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, cree que “no es conveniente” que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, visite en Buenos Aires el mayor centro clandestino de detención que funcionó durante la última dictadura.
“Creo que no es conveniente. Es una fecha muy delicada. El 24, (de marzo) de ninguna manera”, dijo de Carlotto, en una entrevista publicada hoy (6 de marzo del 2016) por el diario Página/12, en referencia a la visita de Obama que coincidirá con el 40 aniversario del último golpe de Estado en Argentina.
Referente de los derechos humanos en el país suramericano, de Carlotto consideró que Obama es “el presidente de un país que fue el que hizo la Doctrina de Seguridad Nacional“, “el país de (Henry) Kissinger y de la formación para reprimir en Latinoamérica”.
La visita del mandatario estadounidense está prevista para los próximos 23 y 24 de marzo, lo que provocó críticas de los organismos de derechos humanos en Argentina, que suelen organizar marchas en cada aniversario del golpe que dio comienzo a la última dictadura (1976-1983).
“Lo que queremos es que respete los lugares, que no vayan”, agregó de Carlotto en la entrevista y reveló que un funcionario de la Embajada estadounidense la llamó para, “muy respetuosamente”, preguntarle su opinión sobre la visita de Obama.
“Le dije que es un presidente que viene a visitar a otro presidente, son dos gobiernos constitucionales que se van a ver, para tratar problemas de ambos países”, dijo la presidenta de Abuelas.
Sin embargo, cuestionó una eventual visita del Mandatario al Espacio de Memoria y Derechos Humanos que funciona en la antigua Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), el mayor centro clandestino de detención que funcionó durante la dictadura.
Para los organismos de derechos humanos de Argentina se trata de “un lugar y una fecha de mucha sensibilidad”, explicó de Carlotto.
La semana pasada, el presidente argentino, Mauricio Macri, adelantó que Obama estará el 24 de marzo en la sureña localidad turística de Bariloche, lejos de las manifestaciones previstas en la ciudad de Buenos Aires con motivo de la efeméride.
De Carlotto relaciona esta decisión del mandatario estadounidense con un pedido que realizaron los organismos de derechos humanos en una reciente reunión con Macri para tener libre acceso a la Plaza de Mayo donde suelen realizar cada año el acto por el 24 de marzo frente a la Casa Rosada.
“Si venía el 24, la Casa de Gobierno iba a estar súper vallada y protegida y nosotros queríamos tener la libertad de hacer el acto”, explicó de Carlotto.
La mujer, que buscó durante 37 años al nieto que la dictadura le había robado, también puntualizó que, aunque en la asociación no han solicitado una entrevista con Obama, sí tienen pedidos que realizar al presidente estadounidense.
“Queremos que la justicia norteamericana, los jueces, se avengan a colaborar en la identificación de los nietos con la asistencia de la justicia del país”, reclamó.
Para ella, la visita de Obama sería distinta si Argentina tuviera “un Gobierno con una sensibilidad distinta”.
“Más que molestarnos Obama, nos molesta la insensibilidad del Gobierno (de Macri), que trata de cambiar la terminología de lo que fueron los derechos humanos y la dictadura cívico militar”, cuestionó.
El próximo 23 de marzo Obama llegará a Argentina tras su paso por Cuba, en la primera visita oficial de un mandatario estadounidense al país suramericano en casi 19 años, desde el viaje que realizó Bill Clinton en 1997, cuando se reunió con el entonces presidente argentino Carlos Menem.