París, AFP
La cantante y ex modelo Carla Bruni, primera dama de Francia, declaró una vez más a la prensa que “como esposa” no desea realmente que su marido, Nicolas Sarkozy, aspire a su reelección a la presidencia francesa en 2012 y denunció rumores sobre su matrimonio.
“Como esposa, no lo deseo realmente. ¿Quizá tengo miedo de que se deje la salud? ¿Quizá tengo ganas de vivir lo que nos queda por vivir en una cierta paz?”, respondió la esposa del presidente Sarkozy en una entrevista que el sábado publicará la revista Madame Figaro, al ser interrogada sobre un segundo mandato presidencial.
“Pero, sean cuales fueren la situación y las decisiones que tome mi marido, me adaptaré con tranquilidad a ellas”, agregó.
Interrogada sobre un “rumor que salió de internet sobre su matrimonio”, Carla Bruni Sarkozy responde que “el rumor forma parte de la naturaleza humana, aún si es un envilecimiento”.
“Siempre ha existido, pero desprecio aquel que proviene de un blog internet y que está firmado Mickey o Superman. Desprecio a quienes se dicen periodistas y utilizan blogs como una fuente creíble”, afirma la primera dama de Francia.
Y juzga que “el hecho” de que periodistas “retomen y propaguen un rumor sin fundamento, difundido por una fuente anónima (me) parece una deriva para la democracia y un peligro para la nobleza de un oficio cuyo sentido mismo es la integridad de la información”.
Carla Bruni Sarkozy, que contrajo matrimonio con el presidente francés — casado antes dos veces — en febrero de 2008, dijo que la forma en que la prensa “maltrata” a su marido “la saca fuera de sí”. “A menudo estoy indignada”, asegura.
También habla del “mundo mediático-político” que califica de “absolutamente violento”.
“No es un mundo que aprecio. Lo encuentro injusto y bastante incompetente. En cambio me gusta el mundo político, mayoría y oposición. Está formado por grandes trabajadores, repleto de sacrificios y de vocaciones”, explica.
Carla Bruni ya había indicado que, a título personal, deseaba que su marido no se presente a un segundo mandato por cinco años en las elecciones de 2012.