Fabián Alarcón V. Quito
La ausencia del volante creativo Wellington Sánchez le pasó nuevamente factura a El Nacional, en la derrota de ayer 3-2 ante la Liga de Portoviejo, en el Atahualpa.
Los puros criollos volvieron a sentir la falta de creatividad en el medio campo y la desconexión entre líneas, tal como le ocurrió la fecha pasada, cuando cayó con Liga de Quito, en Casa Blanca.
Liga de Portoviejo siempre se mostró con mayor volumen de juego, dinámica y peligrosidad. En cinco minutos provocó dos remates al arco y en el 10 ya vencía 1-0, con gol de Luis Macías.
El ariete manabita recibió un pase de Hugo Vélez y, por un mal despeje del central Jorge Guagua, venció al meta Christian Mora.
El tanto reflejaba lo que pasaba en la cancha. El equipo dirigido por el técnico argentino Oswaldo Morelli fue atrevido, desafió a la altitud, al jugar al mediodía y con un rival que de local es difícil.
Pero, en esta ocasión, El Nacional fue más ímpetu que juego colectivo. Los hinchas, quienes esperaban un triunfo en nombre de David Erazo, un seguidor del equipo rojo que fue asesinado el sábado 20 de junio por supuestos seguidores de Liga de Quito, se ilusionaron con el empate (29’).
Con balón detenido, el espigado Orlindo Ayoví peinó hacia atrás el centro de Marvin Pita, el único volante que a momentos puso orden en el medio campo criollo.
Sin embargo, lució solo en este cometido y por eso el equipo careció de contundencia.
Sánchez es el volante que normalmente pone la pausa y proyecta el juego militar desde atrás. Pero su ausencia por suspensión, sumada a la baja de Michael Quiñónez por el mismo motivo, obligó al conjunto comandado por Juan Carlos Burbano a depender de las inspiraciones de Pita.
En el minuto 41estuvo a punto de marcar la diferencia, cuando no alcanzó a rematar dentro del área un pivoteo de Ayoví.
El buen momento de Pita duró hasta el minuto 60, cuando Liga tomó nuevamente ventaja con un golazo de Vélez. El hábil portovejense dribló a tres rivales y, con fuerte remate, puso el balón en la esquina izquierda del arco rojo.
A partir de ese momento el cotejo se tornó de ida y vuelta. Los cerca de 30 seguidores de la ‘Capira’, que se ubicaron en la general noroccidental, saltaban eufóricos al ver cómo Liga, con buen fútbol, conseguía la victoria.
En el minuto 77, el turno de celebrar fue para los hinchas criollos, con el segundo tanto de Orlindo Ayoví. En un error defensivo de despeje, el ariete solo cabeceó el balón en la línea de meta.
A pesar de esa carencia de creatividad en el medio sector, El Nacional se dio modos para generar peligro en el arco de René Esterilla. Ayoví y su compañero de ataque, Ronnal Campos, primero, y Marlon de Jesús, después, se buscaron los espacios necesarios para superar a sus celadores.
Constantemente debieron bajar para abastecerse, pues era muy poco lo que Pita podía generar sin el respaldo adecuado.
A falta de 10 minutos para la finalización del cotejo, Liga apelaba al contragolpe. Cambió su línea de cuatro defensores a línea de cinco. El trabajo de Freddy
Olivo fue determinante, pues, a manera de escoba, barrió todo balón delante de los zagueros.
Mientras que en el ataque, aunque notablemente cansado, Macías peleó hasta el último toda pelota que llegó sus pies. También lo ayudó el ingreso de Manuel Cotera, un delantero hábil y veloz.
Precisamente, en una salida rápida, cuando se jugada el primero de los tres minutos adicionales (90+1), el club manabita encontró su premio por mostrar un mejor fútbol que su rival.
Cotera recibió el pase del boliviano Daner Pachi, quien se la devolvió en pared y este habilitó a Macías, quien derrotó por bajo a Mora para el gol definitivo.
Los hinchas manabitas salieron contentos con la exhibición de su equipo, que pretende clasificarse a la liguilla final. Mientras que El Nacional complicó esta meta.
La tristeza fue evidente en sus seguidores, quienes apenas recordaron al hincha fallecido con una bandera. No hubo globos negros.
CURIOSIDAD
Antes del juego se dio un minuto de silencio por el fallecimiento de David Erazo, hincha de El Nacional que falleció la semana pasada en una gresca con seguidores de Liga de Quito.
En homenaje, la barra Marea Roja ofreció llevar globos negros y una fotogalería del joven. Solo llevaron una bandera. Ni los jugadores mostraron un listón negro.
El ingreso al estadio Atahualpa fue bien controlado por la Policía. Se revisó que no ingresen con armas.
La figura
Freddy Olivo barrió todo en la defensa
Como si fuera un filtro, el volante de marca manabita cubrió todos los espacios delante de la línea defensiva. Impidió la labor de creación de Marvin Pita y despejó todos los pases militares hacia esa zona.
La contrafigura
William Cuero tuvo un opaco desempeño
El lateral tuvo complicaciones para frenar por la izquierda a Hugo Vélez, uno de los desequilibrantes de Liga (P). Además, nunca se proyectó hacia el área rival.
Por eso fue reemplazado en la segunda etapa.