Los caballos de la Policía Nacional ayudan al personal a controlar el cumplimiento del distanciamiento físico. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
Desde que comenzó la emergencia sanitaria causada por el covid-19, a mediados de marzo del 2020, alrededor de 50 cadáveres de personas fallecidas por esa enfermedad se han levantado en la parroquia de Belisario Quevedo, ubicada en el centro-norte de la capital. En el sector se registran 731 casos positivos de coronavirus.
La mañana de este viernes 24 de julio de 2020, el general Fausto Salinas, comandante del Distrito Metropolitano de Quito, lideró un operativo de control en esta parroquia. La Policía Nacional escogió a ese sector para dar inicio a una nueva estrategia para combatir la propagación del covid-19; se denominada ‘Tu distancia es mi derecho’ e incluye la participación de los caballos de la Unidad de Equitación y Remonta.
¿Cómo funciona el proyecto? El general Salinas explicó que los jinetes de esa dependencia utilizan banderas rojas con el mensaje: “peligro, alto riesgo de contagio de covid-19”. Cuando el estandarte es colocado arriba del asta significa que el caballo patrulla en una zona sin distanciamiento físico y con alto riesgo de contagio. Al colocarla abajo implica que sí se cumplen los distanciamientos.
La mañana de hoy, los policías montados recorrieron el sector de la calle Ulloa y Ramírez Dávalos junto al Mercado de Santa Clara. Sobre su pecho, los caballos portaban un papelógrafo con el mensaje: “Cuidado, cubre bocas obligatorio”.
En la Policía se informó que en la nueva estrategia se utilizan 12 caballos, los cuales se distribuirán por zonas. Por ejemplo, cuatro en Chillogallo y la misma cantidad en San Roque, Belisario Quevedo o las zonas de la urbe en donde los asignen.
Pese a que los casos de covid-19 se incrementan diariamente en la ciudad, la gente continúa aglomerándose, organizando reuniones y consumiendo licor en el espacio público. Salinas indicó que hasta el momento se ha retirado a 1 700 libadores en las calles. También se han reportado 278 sancionados por no respetar el toque de queda. “El domingo pasado fue crítico. Tuvimos elevadísimos reportes, principalmente en el sur, de incidentes con gente que tomaba bebidas alcohólicas. Lamentablemente hay jóvenes que se sienten inmunes”.
6 000 policías han sido asignados a los controles durante la emergencia sanitaria. De esa cantidad, 1 000 fueron aislados por prevención. 760 operan en las zonas más afectadas por la pandemia.