Los Bomberos de Quito brindaron una serenata para elevar el ánimo de las personas en el norte de la capital, el domingo 12 de abril del 2020. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
El sonido de la sirena fue la primera señal, luego, un bombero invitó a los vecinos de la avenida Portugal a salir a la ventana o al balcón. Se trataba de una corta pero sentida serenata que ofrecía el Cuerpo de Bomberos de Quito a la gente que está aislada para frenar el avance del covid-19.
Tras las notas iniciales del Chulla Quiteño, Luis Quimbita tocó la canción Lindo Quito de mi vida con su trompeta. Estaba en lo alto de la escalera de una autobomba y la gente se asomó a ver el espectáculo. Las personas que trabajan en una panadería cercana y quienes iban a pie con de compras en sus manos también disfrutaron de la serenata.
Una sorpresa similar se extendió a los barrios del norte, durante la jornada de este domingo. Así se cumplió el segundo día de música para aliviar la agobiante rutina del aislamiento preventivo obligatorio. Este equipo del Cuerpo de Bomberos de Quito ya había visitado a los vecinos de El Recreo, Quitumbe, la Mena 2 y el sector de la av. Napo, en el sur, el sábado 11 de abril del 2020.
Desde lo alto, y cobijado por las banderas de Ecuador y de Quito, contagió con su alegría a los vecinos, que aplaudían al escuchar esas tonadas que cada diciembre se vuelven la banda sonora de las fiestas de la ciudad.
En las aceraa y los balcones, la gente gritaba “otra, otra”. También se oían unos fuertes ¡Viva Quito! y había quienes se llevaban la mano al pecho, para decirle a los Bomberos “gracias” por este regalo.
Con las canciones, los Bomberos esperan que las personas se mantengan en casa durante la emergencia sanitaria. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
“Me siento muy alegre de poder llegar a la gente en estos momentos difíciles y recordarle que los Bomberos somos sus amigos y estamos para salvar vidas”, dijo Quimbita, minutos después de bajar de la escalera de una autobomba.
Su compañero, Gabriel Rodríguez, comentó que con esta iniciativa se busca brindar con música “una ayuda psicológica, un apoyo emocional en estos momentos tan duros que estamos atravesando como sociedad, para que el encierro sea más llevadero”.
Para él, esta iniciativa es una forma de recordarle a la gente que al quedarse en casa, no está cuidando solamente a su familia sino a toda la comunidad. Por eso pidió a la ciudadanía resistir y así colaborar para que el virus deje de propagarse en la ciudad.
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