Alcalde Jorge Yunda informa que los bomberos intentan controlar puntos de calor aún activos en el Casitagua

A las 07:29 de este 17 de enero del 2020 se podía observar el área afectada por el incendio forestal en el cerro Casitagua, que se inició en horas de la mañana del 14 de enero. Foto: Carlos Mora/ EL COMERCIO

A las 07:29 de este 17 de enero del 2020 se podía observar el área afectada por el incendio forestal en el cerro Casitagua, que se inició en horas de la mañana del 14 de enero. Foto: Carlos Mora/ EL COMERCIO

07:29 del 17 de enero del 2020. Las columnas de humo y las llamas ya no se presentaban en el Casitagua, después del incendio forestal que afectó a las laderas del cerro en Pomasqui. Foto: Carlos Mora/ EL COMERCIO

El alcalde de Quito, Jorge Yunda, informó a las 07:31 de este viernes 17 de enero del 2020 que los bomberos, militares y funcionarios del Ministerio del Ambiente coordinan acciones "controlar los escasos puntos de calor aún activos" en el cerro Casitagua, en Pomasqui, noroccidente de la capital.

Este viernes se cumple el tercer día del operativo para apagar el incendio, por lo que las autoridades monitorean la zona y analizan las condiciones de la vegetación y climática con el objetivo de evitar que las llamas se activen y pongan en riesgo el lugar.

El secretario de Seguridad del Municipio, Juan Pablo Burbano, señaló que se han "encontrado focos de calor aún y en pocas horas se dará información actualizada". El funcionario aseguró que "no hay presencia de columnas de humo" en el cerro.

A las 07:29 de este 17 de enero del 2020 se podía observar el área afectada por el incendio forestal en el cerro Casitagua, que se inició en horas de la mañana del 14 de enero. Foto: Carlos Mora/ EL COMERCIO

El helicóptero de los Bomberos realizó un sobrevuelo en la zona y levantará un informe para determinar la cantidad de zona afectada.

A las 07:29, el cerro Casitagua no presentaba columnas de humo. En las faldas de la montaña ya no se observan las llamas que se iniciaron desde el pasado martes 14 de enero. La claridad de la mañana permitía mirar la extensión del daño causado por el fuego. En el ambiente ya no se percibe el olor a quemado.

Suplementos digitales