Redacción Construir
El acto se realizó el miércoles pasado, desde las 19:00.
33
años
de vigencia
tiene este evento de la arquitectura panamericana.“Aunque puede parecer un lanzamiento prematuro, no lo es. Una bienal con la categoría de la quiteña requiere de mucho tiempo, esfuerzo, apoyo y, por supuesto, dinero”, explicaba la arquitecta María Samaniego, coordinadora general de la BAQ 2010.
El acto fue sobrio y contó con la presencia de unos 100 asistentes, que llenaron el patio adecuado para el evento.
En el programa intervinieron el arquitecto Alberto Andino, presidente del Colegio de Arquitectos del Ecuador, núcleo de Pichincha; Augusto Barrera, alcalde de Quito; y Ramiro Noriega, ministro de Cultura del Ecuador.
Los tres destacaron la importancia de la bienal para el desarrollo cultural del país.
Los actos culminantes fueron la premiación al ganador del concurso del afiche de la bienal; y el homenaje al Arq. Ovidio Wappenstein, por su trayectoria profesional y su aporte a la arquitectura del país.
El ganador del primer premio del concurso fue el diseñadorSilvio Giorgi, quien recibió el galardón de manos de manuel Mera, gerente de Hormi 2, una de las entidades que apoyan la Bienal. También apoyan el Ministerio de Cultura, el Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, la Junta de Andalucía, la Mutualista Pichincha, entre otras entidades.
La presentación del homenaje estuvo a cargo del arquitecto Luis Oleas, uno de los decanos de la arquitectura nacional.
La confrontación de la BAQ tendrá siete categorías: diseño arquitectónico, diseño urbano, rehabilitación y reciclaje, paisajismo, teoría y crítica de la arquitectura, revistas especializadas y premio hábitat social y desarrollo.