Joe Biden cuenta con una ventaja de 253 votos frente a los 214 de Trump en el Colegio Electoral. Foto: Reuters
El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, tomó este viernes 6 de noviembre del 2020 un estrecho liderazgo sobre el presidente Donald Trump en los disputados estados de Georgia y Pensilvania, acercándose un poco más a la Casa Blanca en una tensa contienda en la que un puñado de estados indecisos sigue contando votos.
Biden cuenta con una ventaja de 253 votos frente a los 214 de Trump en el Colegio Electoral, que determina el ganador, según la mayoría de las principales cadenas de televisión.
Si logra los 20 votos electorales de Pensilvania, el exvicepresidente superaría los 270 necesarios para asegurarse la presidencia, mientras que si consigue solo los 16 de Georgia, se quedaría a las puertas del triunfo final.
En Pensilvania, Biden aventajaba en 5 500 votos a Trump en la mañana del viernes, mientras que en Georgia lideraba el recuento por 1 097 sufragios.
Biden, de 77 años, se convertiría en el próximo presidente si conquista Pensilvania, o si gana dos del trío de estados formado por Georgia, Nevada y Arizona.
Trump recorta su distancia con Biden en Arizona pero a ritmo insuficiente
Donald Trump continuó este viernes recortando la distancia de votos que le separa del candidato presidencial demócrata, Joe Biden, en Arizona, aunque a un ritmo insuficiente para tomar la ventaja en ese estado clave.
De acuerdo con la última actualización del Centro de Elecciones del condado de Maricopa, Trump recibió 38 388 votos más en el último conteo, lo que significa poco más del 53% de los sufragios de esta tanda, un porcentaje que está por debajo del casi 60% que debería puntuar para recuperar el liderato en las urnas en ese estado, que otorga 11 votos electorales.
Aún faltan por computar 173 000 papeletas en todo el estado de Arizona, mientras que en el condado de Maricopa, cuya capital es Phoenix, faltan unas 92 000, según la misma fuente.
Así, con aproximadamente el 95% de los votos escrutados, Biden encabeza la contienda por casi 30 000 votos de ventaja, una diferencia corta que provoca que Trump y sus seguidores tengan la esperanza de poder firmar una victoria “in extremis” en un estado tradicionalmente conservador.
Biden, al que medios como la agencia Associated Press (AP) y la cadena de televisión Fox News dieron como vencedor la noche electoral, ha insistido por activa y por pasiva en que se deben contar todos los votos antes de que se proclame un vencedor.
Arizona, un feudo conservador inexpugnable desde que en 1996 el progresista Bill Clinton (1993-2001) ganara, puede cambiar de signo en las próximas horas.
La tarea es difícil, pero no imposible: Trump debe recibir el apoyo de algo más del 58% de los votos restantes en todo el estado.
La principal preocupación expresada por el mandatario y coreada por algunos de sus votantes es que se esté dando un “fraude electoral“, una alegación no comprobada que pone en riesgo la salud y la credibilidad de la democracia estadounidense.
En una protesta este 6 de noviembre enfrente del centro de conteo en Phoenix, unos 600 simpatizantes de Trump se quejaron contra lo que consideran un proceso “corrupto” que ha favorecido al candidato demócrata.
Entretanto, Trump se aferró este viernes a la vía legal para lograr la reelección a medida que se reducían sus opciones de ganar, y volvió a cuestionar sin pruebas “la integridad de todo el proceso electoral” en su país.
“Seguiremos en este proceso a través de todos los aspectos de la ley, para garantizar que el pueblo estadounidense tenga confianza en el Gobierno. Nunca dejaré de luchar por ustedes y por nuestro país”, dijo Trump en un comunicado distribuido por su campaña.