Washington, agencias, Redacción
El director ejecutivo del Comité Empresarial Ecuatoriano, Roberto Aspiazu, se mostró complacido por la decisión de EE.UU. de extender por un año más el Tratado de Preferencias Comerciales Andinas (Atpdea, por sus siglas en inglés).
El Senado estadounidense aprobó la madrugada de ayer la prórroga de los beneficios arancelarios a Ecuador, Colombia y Perú, un tratado, vigente desde 1991, que exime de aranceles a productos de los países andinos por su cooperación en la lucha antidrogas. Solo Bolivia está suspendida de la Atpeda, desde 2008, cuando Washington estimó que el país no hacía lo suficiente para combatir el narcotráfico, en el marco de roces entre ambos gobiernos, que desde hace más de un año carecen de embajadores en sus sedes diplomáticas.
La Atpdea ha permitido pasar de USD 97 millones de exportaciones a EE.UU. a más de USD 17 000 millones en 2008, de los cuales USD 4 000 millones constituyen importaciones no petroleras, según cifras que maneja el Congreso estadounidense.
“Recibimos con beneplácito la noticia de la renovación en vísperas de Navidad. Nuevamente, fue un proceso tedioso y difícil que encontró dificultades. Seguimos pensando que la solución es un acuerdo de largo plazo que evite la incertidumbre que suponen las renovaciones de corto plazo. No hay inversión productiva que pueda desarrollarse a futuro con un régimen de preferencias cortoplacista”, añadió Aspiazu.
Por su parte, el embajador de Ecuador en EE.UU., Luis Gallegos, dijo que la renovación del programa “asegura que cientos de miles de personas, tanto en mi país como en EE.UU., conserven las fuentes de trabajo que fluyen de las exportaciones, en especial de flores, vegetales y atún”.
La inclusión de Ecuador dentro de la extensión de la Atpdea había sido criticada por legisladores republicanos, quienes ven con recelo las políticas internas al interior del país y su participación dentro de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba).
Del otro lado, la Asociación de Fabricantes de Ropa y Calzado (AAFA), de EE.UU., que abogó activamente por la renovación de las preferencias, aplaudió la decisión del Congreso e instó al presidente Obama a promulgarla antes del 31 de diciembre. “Si estos beneficios para las naciones andinas no están vigentes para fin de año, la industria de la ropa y el calzado experimentará un cuarto año de crecimiento negativo”, advirtió su presidente Kevin Burke.