María Elena Vaca. Redactora
Tres esferos de negro, un tren a escala y más de 10 carpetas amarillas con ordenanzas y normas municipales son los únicos materiales que reposaron ayer sobre el escritorio del alcalde electo, Augusto Barrera. Todo, cuando hoy formalmente deja su oficina, en la Orellana y Whymper, y se traslada al despacho municipal.
Las carpetas y archivos municipales -confiesa- desde hace más de dos meses se han convertido en su obsesión. No deja de leerlos, sobre todo cuando de transporte y movilidad se trata. Tiene una meta que espera cumplir: inaugurar el metro de Quito durante su administración municipal.
Los actos de posesión
El encuentro protocolario será hoy, a las 18:15, en el Teatro Sucre. En la cita participará el presidente Rafael Correa. Barrera recibirá el collar municipal por parte de Omar Simon.
El sábado, a las 17:00, en la calle J, en Solanda, se realizará una posesión ciudadana. Barrera, junto a sus concejales, saldrá a las 15:30 de la parada del Trolebús La Y. En esa cita, la ciudadanía entregará banderas al nuevo Alcalde de la ciudad.
El nuevo Alcalde tiene como único bien un departamento ubicado en El Batán, en donde actualmente reside. El inmueble está valorado en USD 70 000. Para dar la entrada, vendió un auto. Aún mantiene esta deuda.
A su espalda, pegado sobre la pared tiene listo el organigrama del Municipio que piensa diseñar durante su administración. Allí constan tres secretarías: desarrollo social, económico, territorial, además de una administración general y una coordinación territorial. No se cansa de decir que en su período habrá cambios en su equipo de trabajo, “el lunes haré los anuncios”.
Tiene listo todo su trabajo. Desde que llega a su oficina no deja de atender llamadas telefónicas y entrevistas de los medios de comunicación. O, al menos, esa fue la agenda que tuvo diseñada el jueves, desde las 10:00.
Empero, su jornada empezó desde las 06:00. A esa hora, usando un short negro, una camiseta y gorra blanca salió a trotar desde su departamento, ubicado en El Batán, al parque La Carolina. Tres vueltas de 10 kilómetros en el interior del parque fueron la ruta de Barrera, quien también fue atleta en el colegio Benalcázar. Al llegar al parque estira sus brazos y sus piernas, da un pequeño trote y luego empieza su ruta, con la mirada siempre al frente
En La Carolina pasa inadvertido por el resto de deportistas, excepto por los seleccionados de atletismo de Ecuador, quienes se acercan a saludarlo. También por Víctor Hugo Vivanco, vendedor en la Cruz del Papa, quien luego de la jornada de ejercicios, a las 08:00, lo recibe con un vaso de jugo de naranja con zanahoria. Vivanco lo conoce desde hace tres años, “viene todos los días, este es el terreno de los duros y él es sencillo, humilde, pero decidido”, lo describe.
De un sorbo, Barrera se hidrata, y, sin perder el tiempo, regresa a su casa. Allí está Andrea Nina, con quien comparte desde hace seis años. Ella lo recibe con un beso. Mientras se ducha, su esposa le alista el desayuno. Ahora que José Ignacio, de 9 años, y Joaquín, de 12 años, hijos de Andrea, están de vacaciones desayunan en familia. Se sirven un café con leche y un sánduche de mortadela. ‘Nachito’, el hijo menor de Andrea, define a Barrera como “divertido, siempre jugamos fútbol en La Carolina..”.
Y es que esa es su pasión, pues además de ir al estadio, es hincha de la Liga Deportiva Universitaria. Siempre organiza partidos de fútbol con sus amigos, entre ellos Vinicio Chalá, quien es su chofer desde hace un año.
Con él también juega fútbol en La Carolina. En la época de campaña organizó un partido con los moradores del barrio El Paraíso, más arriba de Atucucho. Obtuvo un trofeo en ese campeonato.
El Alcalde -dice Vivanco- juega como puntero derecho. “Y le encanta el deporte, le ayuda que no tiene vicios, no fuma ni toma”. Para Barrera, los parques y jardines serán una prioridad en su gestión. “Organizaré partidos en los barrios y canchas, las áreas verdes serán espacios íntegros para la familia”.
Barrera vive también con su hijo Pablo, de 16 años. Pero él ahora está recorriendo Alemania. “Tengo tristeza porque él no estará hoy en mi posesión, pero la filmaré para que la vea”.
A la posesión en el Teatro Nacional Sucre le acompañarán sus tres hermanos, además de sus padres. “Mi mayor alegría es ver a la familia unida”.
Su esposa Andrea Mina, quien se encargará de los proyectos y programas sociales, entre ellos el Patronato Municipal San José, teme que no haya espacios para disfrutar con su familia, “pero estoy segura de que encontraremos lugares para reunirnos…”.
Ambos son un dúo perfecto. A Mina le encanta la cocina, mientras que a Barrera le gusta disfrutar de platillos tradicionales como las habas, choclos y los locros, “al contrario de Mafalda, a mí me encantan las sopas”.
En su vestimenta es totalmente informal. Una camisa y un pantalón de tela es todo lo que utiliza, aunque sabe que en ocasiones protocolarias le tocará usar terno, “aunque el hombre no necesita forrarse para demostrar lo que sabe y piensa”.
Por ello, ayer ingresó al Palacio Municipal con ese mismo ‘look’ informal. Allí, a las 17:00, recibió en una pequeña ceremonia íntima el bastón y el Estatuto Municipal, por parte del alcalde saliente Andrés Vallejo.